CCE y Coparmex advierten riesgos con nueva reforma laboral
CIUDAD DE MÉXICO (Expansión) - Los líderes empresariales en México alertaron sobre algunos riesgos para las empresas por la ya aprobada reforma laboral a la que sólo le resta ser promulgada por el poder Ejecutivo.
La demostración por parte de los patrones del despido de un trabajador es una de las preocupaciones principales de las compañías, dijo Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), citado por el diario Reforma.
"El que tiene que aportar la prueba de culpa de una persona que se dice despedida tiene que ser el empleador, tú tienes que probar lo negativo, el trabajador ya no tiene que presentar las pruebas de que a él lo despidieron. Sabemos que eso causa problemas y los ha causado en muchos países de América Latina", dijo Salazar Lomelín.
El exdirector de FEMSA añadió que los empresarios esperan un anexo sobre la reforma laboral sobre preocupaciones de orden práctico que les hicieron saber a los legisladores pues son en beneficio de los trabajadores.
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"Los empresario todavía esperamos un pequeño anexo que debemos tener en las próximas semanas sobre unas cuestiones de orden prácticos (...) tenemos confianza de que vamos a ser escuchados", dijo Salazar Lomelín en la firma de un acuerdo para la paz laboral con el gobierno federal, y los miembros de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).
En la víspera, la Coparmex lamentó que en el Senado se desecharán las reservas al proyecto de ley avalado por los diputados y que hubieran derivado en una ley del trabajo moderna sin vulnerar la estabilidad y la paz laboral.
"Lamentamos que se tome la puerta falsa y que los señores senadores, la mayoría de ellos, estén aprobando una ley por mientras, una ley que está (...) condenada a ser modificada tan pronto inicie el nuevo periodo ordinario de sesiones como se ha planteado”, dijo el presidente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos.
De Hoyos consideró que esta ley laboral se dictó desde los intereses externos del Congreso estadounidense.
“Se está perdiendo competitividad laboral de forma deliberada frente a nuestros competidores comerciales, muchos de los excesos no fueron elaborados en San Lázaro ni aquí, fueron dictados desde Washington", sostuvo.
Entre las preocupaciones de la Coparmex, De Hoyos enlistó algunas:
1. No se reconoce la libertad del trabajador.
2. Las pequeñas y medianas empresas pueden ser condenados en sentencias laborales, pues cuentan con menos estructuras e información para resolver diferendos.
3. Revisión del 100% de unos 500,000 contratos de trabajo. Miles de asambleas.
"Esta norma para nada es un incentivo para que se den estos niveles de inversión", dijo De Hoyos.
"Esta legislación no es un buen regalo para el primero de mayo", aseguró.
