La actividad del sector manufacturero de Estados Unidos repuntó desde un mínimo de 11 años en mayo, la señal más fuerte a la fecha de que lo peor de la crisis económica está quedando atrás, aunque la recuperación de los efectos de pandemia del COVID-19 podría tardar años debido al elevado desempleo.
El Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM) dijo el lunes que su índice de actividad fabril nacional subió a 43,1 desde 41,5 en abril, que fue el registro es el más bajo desde abril de 2009.
Analistas consultados por Reuters esperaban una lectura de 43,0.
La marca de 50 separa la contracción de expansión.
Por su parte, el gasto en construcción en Estados Unidos bajó menos de lo previsto en abril, aun cuando otros sectores de la economía sufrieron por causa de la crisis del coronavirus.
El Departamento de Comercio dijo el lunes que el gasto en construcción se redujo 2.9%, el mayor declive desde enero de 2009. Analistas consultados por Reuters esperaban un descenso de 6.5% en abril.
Las cifras de marzo se revisaron para mostrar que el desembolso se mantuvo estable, en lugar del alza de 0,9% que se informó inicialmente.