Entre los productos con mayor incidencia al alza sobre los precios durante la quincena destacaron algunos agropecuarios, como el jitomate, la tortilla de maíz y el pollo, pero también rubros como transporte aéreo.
"Si bien la inflación anual llegó a su pico la última quincena de abril, el descenso ha sido muy ligero, desde 6.12% hasta 5.80%, por lo que comienza a materializarse un escenario de una inflación mayor, incluso por encima de nuestro pronóstico de 5.0% al cierre de año", dijo Grupo Financiero Monex en un reporte este lunes.
El Banco de México mantuvo a mediados de mayo su tasa clave en un 4%, en una decisión unánime, citando la necesidad de consolidar una trayectoria decreciente de la inflación hacia su meta permanente del 3% +/- un punto porcentual.
Solo en los primeros 15 días de mayo, los precios al consumidor cayeron un marginal 0.01% respecto a la quincena inmediata anterior, mientras que el índice subyacente presentó un incremento del 0.33%.
En tanto, la inflación subyacente, se ubicó en un 4.22%, una cifra que también resultó superior a la estimada en el sondeo de Reuters.
Efectos base
Es preciso diferenciar entre el aumento de la inflación ocasionado por el nivel de base de comparación –entre enero y marzo de 2020 hubo una disminución del INPC- y el incremento derivado de presiones inflacionarias recientes, es decir, el aumento de precios durante la primera mitad del año, señaló Banco Base en un informe.
“Desde la segunda quincena de diciembre a la primera quincena de mayo, la inflación anual ha subido desde 3.08% a 5.80%, es decir, un incremento de 2.72 puntos porcentuales. De estos 2.72 puntos porcentuales, 0.59 puntos o 21.57% se debe al efecto de base de comparación, el resto, 2.13 puntos o 78.43%, se debe a presiones inflacionarias en la primera mitad del año”, detalló la institución.
Al hacer el mismo ejercicio para la inflación subyacente y no subyacente, se puede observar que la totalidad del efecto de base de comparación, hasta la primera quincena de mayo, se concentra en el componente no subyacente, donde se observaron las mayores disminuciones en precios entre enero y abril del año pasado.
“En la primera quincena de mayo, la inflación no subyacente se ubicó en 10.83%, pero eliminando el efecto de año base esta tasa baja a 7.81%, considerablemente por debajo del dato observado. Por otro lado, en la inflación subyacente, no se observa un efecto de baja base de comparación. Es decir, el dato anual de la inflación subyacente está explicado en su totalidad por presiones inflacionarias recientes”, precisó Banco Base.
Con información de Reuters