Santa Lucía tendrá un sistema biométrico de identificación: así funcionará

El nuevo aeropuerto contará con E-Gates, puertas con un mecanismo de reconocimiento que permitirá a los usuarios pasar a salas de espera y de abordar sin tener que mostrar su boleto varias veces.
Militares y trabajadores laboran a marchas forzadas para que la terminal esté lista para el 21 de marzo.

Una de las novedades tecnológicas del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), también conocido como aeropuerto de Santa Lucía, serán los sistemas de control biométrico, como los que ya se usan en aeropuertos de Inglaterra, España, Países Bajos y Estados Unidos.

Con ellos, se busca que baste con un registro en los módulos de las aerolíneas o en los quioscos de autoservicio y con la toma de una fotografía, para que los pasajeros puedan ingresar a las salas de última espera o a las puertas de abordaje sin necesidad de volver a mostrar el boleto o una identificación. El objetivo es que esto facilite los trayectos de los usuarios de la terminal.

A menos de dos meses de que se inaugure el AIFA, Grupo Expansión realizó un recorrido por las instalaciones y constató la instalación de los equipos biométricos, únicos en su tipo en México.

A este sistema de acceso biométrico se le denomina E-Gates. En Santa Lucía, serán instalados 90 equipos provenientes de Portugal.

¿Cómo funcionan los equipos biométricos?

Al llegar al AIFA, los pasajeros deberán acercarse a los módulos de la aerolínea con la que viajarán, donde, además de documentar su equipaje, tendrán que registrarse y se les tomará una fotografía que servirá para el reconocimiento facial en las puertas automáticas.

También habrá 20 quioscos de autoservicio para quienes no documentarán equipaje. Estas personas podrán registrarse mediante su pasaporte o identificación; también deberán digitar número de vuelo y aerolínea y deberán colocarse frente a una cámara para una fotografía.

Pablo Villagrán Toledo, responsable de la instalación de estos equipos en el AIFA, por parte de la empresa Apollocom, aseguró que los equipos de autoservicio serán de uso fácil y rápido para todos los usuarios.

“Una persona va a tardar dos minutos en registrarse, va a llegar la persona, va a hacer su check-in, le va a aparecer su número de boleto, la aerolínea, le toman la fotografía y aquí (en las E-Gates) se va a llevar un minuto en pasar, se va a hacer una base de datos, va poder ingresar, sin necesidad de imprimir un boleto”, señaló.

Después de pasar las líneas de inspección con tomógrafos de seguridad, los pasajeros se encontrarán con la primera línea de E-Gates para poder ingresar a la zona comercial y a las salas de espera.

“Al pasar aquí, los equipos tienen una cámara del lado izquierdo que le va a hacer un reconocimiento facial y la pantalla se va a prender de verde como un semáforo, abren las puertas de cristal e ingresa el pasajero”, explicó Villagrán Toledo.

Más automatización, menos personal

El técnico señaló que los sistemas biométricos están diseñados para funcionar de manera autónoma, sin la necesidad de ser operados por una persona, y en caso de que fallen o que no detecten el rostro de la persona, habrá dos opciones adicionales.

La primera será que se pueda escanear el código QR del boleto de avión en un lector con el que contará cada puerta automática, o bien, que un encargado por cada línea de E-Gates asista para apoyar.

“Ya no hay necesidad de tener a alguien recibiendo su boleto, simplemente todo va a ser biométrico”, dijo Villagrán Toledo.

El AIFA es uno de los principales proyectos de infraestructura del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrados. Está previsto que se inaugure el 21 de marzo.

Santa Lucía alista su despegue