Los aranceles que impuso el gobierno de Donald Trump a México no tendrán una gran duración aunque afectarán la confianza de las empresas, especialmente las del norte, que dependen en gran medida de la economía estadounidense, consideró UBS en un reporte.
"Aunque las tensiones comerciales pueden inquietar a los inversores, es poco probable que se produzca una guerra comercial a gran escala", destacó el banco. "La relación comercial entre Estados Unidos y México ha superado tormentas políticas pasadas y es probable que vuelva a hacerlo".