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Amigos, familia… ¿y negocios?

Al abrir un negocio es común pensar que los más cercanos son los indicados para emprenderlo; el esquema funcionará si hay un límite entre lo laboral y el parentesco, dicen expertos.
jue 03 diciembre 2009 06:02 AM
La amistad se pone a prueba al iniciar un negocio entre familiares y amigos. (Foto: Jupiter Images)
amigos (Foto: Jupiter Images)

La escasa oferta de oportunidades laborales atractivas, conduce a que muchos jóvenes consideren la posibilidad de tener su propio negocio. Este paso se puede dar con el apoyo de amigos y familia, pero para que el esquema funcione, es vital la compatibilidad de intereses, talentos, y que exista un límite entre lo laboral y lo personal.

En México, la permanencia de los negocios de parientes muestra una tendencia clara, sólo un 40% logra pasar exitosamente y en armonía a la segunda generación. Eso significa que seis de cada diez de esas micro empresas son vendidas, fragmentadas o quiebran al ser conducidas por los descendientes, según datos del investigador del ITAM, Carlos Cosio.

Ante ese panorama, resulta interesante que previo a que empieces a proyectar un negocio con un familiar o amigo cuestiones ciertos aspectos.

El director de W8 Education, Inc., empresa de capacitación y asesoría en desarrollo personal y profesional, Víctor del Rosal, sugirió las siguientes preguntas:

- ¿Cuánto esperas que dure el negocio que tienen en mente?

- ¿Qué medidas tomarán si alguna de las partes no cumple con su compromiso?

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- ¿Qué expectativas tienes respecto a tu amigo o familiar y viceversa?

- ¿Cómo trabajarán (estrategias) para que el negocio sea redituable?

- Además de ese familiar ¿piensas incluir algún otro integrante?

- ¿Cuentan con un plan por si llega el momento de concluir ese proyecto?

Por lo general, comentó, quienes empiezan una empresa con sus amigos no tienen compromisos financieros muy fuertes, pero conforme el negocio avanza los socios y las responsabilidades maduran y deben tomarse en cuenta otros factores que modificarán la motivación original del negocio. Entonces la amistad se pone a prueba.

Por eso la principal herramienta, sea cual sea el tipo de organización, es la comunicación.

Lo ideal es plantear -con el apoyo de un abogado- asuntos tan delicados como el dinero  y la asignación de funciones.

"Más adelante los sentimientos salen a flote, y tal vez llegue el momento de elegir entre el negocio y el aprecio familiar o el amigo", indicó del Rosal, también fundador del Foro W8 de Líderes Globales.

Principio de visión

Un segundo paso si decides tener como socio a alguna de esas figuras, apuntó, es hacer a un lado todas las "fantasías" que hayas concebido sobre tus parientes o el trabajo maravilloso con los amigos.

"Hay que comenzar por identificar en esa persona aquello para lo que es bueno, y los mecanismos mediante los cuales se evaluará el desempeño de cada parte", apuntó Víctor del Rosal.

En el caso de los amigos, explicó, hay quienes se conocen desde la escuela; su experiencia se concreta a los trabajos en equipo, sin embargo, en lo laboral desconocen sus respectivos estilos, sobre todo en lo económico. "Ninguno sabe con precisión qué situaciones se presentarán a futuro y eso puede traducirse, a futuro, en sorpresas desagradables que deben preverse".

La competitividad en una empresa depende no sólo de la adaptación al mercado, sino también de la integración de sus miembros.

In-laws

Aunque este concepto hace referencia a la relación entre ‘parientes políticos', "en el mundo empresarial un negocio in-laws es aquel donde existe un lazo afectivo, pero donde se guarda cierta distancia", expresó la catedrática de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), Rosina Ramírez.

Para lograr ese equilibrio en una empresa recién creada, dijo, hay que considerar lo siguiente:

- Distribuye los puestos del organigrama con base en méritos, no en el parentesco.

- En las reuniones incluye a todo tu equipo (por pequeño que sea); las personas externas deben tener los mismos derechos y deberes.

- ¿Algún familiar se equivocó en una decisión? Indícaselo en el momento y evitarás perder el control más adelante.

- No descargues en el negocio conflictos familiares o de amigos.

- Determina rangos salariales para los trabajos diversos y reditúa económicamente a cada integrante de acuerdo con las funciones realizadas, sin favoritismos.

- Si tú y tu amigo ocuparán puestos estratégicos (que requieran toma de decisiones), considera a un tercer (de preferencia externo) que equilibre sus opiniones.

- Pon en práctica los principios básicos de cualquier relación: honestidad, flexibilidad y compatibilidad de intereses.

- Evita tratar asuntos personales o familiares en la oficina, ya que los demás empleados podrían sentirse marginados.

Un negocio entre amigos requiere de opiniones sinceras y argumentadas. Nunca deben callarse las diferencias por temor a ser removidos o perder la amistad, porque "generalmente es más sencillo decirle al jefe sólo lo que desea escuchar", expresó la especialista de la UPAEP.

Si bien, los especialistas recomiendan a los jóvenes adquirir sus primeras experiencias laborales en organizaciones, aconsejaron que si la decisión se encamina a abrir su negocio, necesita fijarse no sólo en la ‘lealtad' de la persona, sino también que los talentos sean complementarios. Así podrán identificar de forma objetiva los problemas que dificulten el crecimiento de la empresa.

Si no existe una cultura corporativa pueden surgir problemas por insignificancias que a largo plazo perjudiquen la comunicación entre el personal y el trato con los clientes, añadió del Rosal.

En una compañía, las responsabilidades de los socios no deben confundirse -aunque sean amigos- porque lo que más daña a una empresa es duplicar las obligaciones.

 

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