La pasión por la moda arropa al negocio

En medio de textiles, patrones, cortes y apliques, dos estudiantes universitarias de diseño de modas, no contuvieron más sus sueños y crearon su propia marca, Pink Magnolia. Rompiendo con la tradición en la industria de la moda, Cuca Díaz y Paola Wong no esperaron a ser asistentes en una casa de confecciones ni a terminar sus estudios para especializarse, sino que se dejaron llevar por su talento y crearon un negocio en el Distrito Federal.

"A nosotras se nos presentó una oportunidad de repente de lanzarnos a la industria de la moda y sin pensar, nos unimos un día y creamos un concepto que juntara los estilos de ambas y comenzamos a trabajar en una primera colección que se vendió casi en su totalidad el día de la inauguración de la tienda", recuerda Wong una joven de 22 años que estudiia en la Universidad Centro.

Con 200,000 pesos aportados por la familia, estas dos universitarias rentaron un local en Polanco, adquirieron la materia prima, muebles para la decoración y contrataron costureras que les ayudaran a confeccionar una colección.

Con la primera venta lograron financiar una nueva colección y seguir adelante con su sueño de vender diseño local pensado para la mujer mexicana de entre 18 y 40 años de edad.

"Yo hice un curso en Nueva York y también estuve en Argentina conociendo un poco de la propuesta local. Con esas experiencias me di cuenta que en México hace mucha falta el apoyo al diseño local, siempre se cree que por ser mexicano es de mala calidad y ese es nuestro mayor reto, lograr que la gente consuma lo hecho aquí en el país por talento mexicano", agregó la diseñadora.

Argumentando que además de talento y formación, un emprendedor necesita pasión por lo que hace, Wong cree firmemente que estar en el concurso de Premio al Estudiante Emprendedor 2010 es una ventana para dar a conocer lo que hacen y seguir en su búsqueda de posicionar el diseño mexicano.

Gracias al entusiasmo que sienten por lo que hacen, es que estas dos diseñadoras han logrado conjugar sus estudios con el trabajo, dejando de lado las dificultades de emprender a corta edad y con escaso conocimiento en los negocios.

Sentirse apasionado por lo que se hace es para el autor del libro "Pasión por Emprender", Andy Freire, la gasolina que mueve a cualquier negocio hacia el éxito, pero no es el único ingrediente que hará una empresa rentable.

Pensando en eso, el autor y también cofundador de Officenet, detalla que detrás de esa pasión por un tema o por crear su negocio hay determinantes claves que llevan a una persona a fundar su propia empresa e independizarse.  

A continuación conoce las once condiciones determinantes detrás del emprendedor que resalta Andy Freire en su libro.

1) Emancipación: Más del 60% de los grandes emprendedores dicen que la búsqueda de la libertad y la independencia es su principal motivación para emprender.

2) Moderación en la ambición de dinero: La gran mayoría ve al dinero como una consecuencia inevitable del emprender exitosamente, no como un objetivo en sí mismo.

3) Pasión: Emprender es estar dedicado en mente, cuerpo y alma todo el tiempo al proyecto.

4) Resultados: Los grandes emprendedores sueñan , pero sobre todo hacen realidad sus proyectos.

5) Espiritualidad: Los grandes emprendedores suelen combinar su trabajo profesional con un profundo trabajo consigo mismos.

6) Novicio (actitud de aprendiz): Los grandes emprendedores muestran una gran humildad y una voluntad permanente de aprender.

7) Disfrute del camino: Encuentran un curioso equilibrio entre la dureza de sortear obstáculos y el placer y el humor de disfrutar cada paso que dan día a día.

8) Éxitos compartidos: Siempre ven a los integrantes de su equipo como socios y buscan formas de compartir con ellos el valor creado.

9) Determinación: Toman el tiempo necesario para las decisiones pero, una vez que lo hacen, muestran gran seguridad y firmeza en sus acciones.

10) Optimismo y sueños: Todos tienen una clara visión y esperanza sobre hacia dónde pueden y quieren llevar su futuro y el de su empresa.

11) Responsabilidad incondicional: Los grandes emprendedores actúan como protagonistas y asumen una responsabilidad incondicional frente a su destino.