La cervecera japonesa Asahi 'se sirve' tres marcas europeas de AB InBev
La cervecera Anheuser-Busch InBev (AB InBev), que está en proceso de adquisición de su rival SABMiller, aceptó una oferta de la japonesa Asahi Group por Peroni y un grupo de otras marcas de cervezas premium europeas de SAB, reportó este martes de acuerdo con un despacho de la agencia británica Reuters.
AB InBev precisió que la adquisición de las marcas por parte de Asahi estaba condicionada al cierre exitoso de su compra de SAB.
Asahi Group reveló en febrero que estaba en conversaciones exclusivas para comprar las marcas de cervezas Peroni (Italia), Grolsch (Holanda) y Meantime (Reino Unido), propiedad de SAB, por 2,550 millones de euros (2,900 millones de dólares), en un intento por contrarrestar su lento crecimiento en el mercado japonés, agregó Reuters.
La venta es parte del plan de AB InBev para asegurar la aprobación de los organismos antimonopolio por la compra de SAB por más de 100,000 millones de dólares acordada el año pasado.
Riesgos en Japón
Para Asahi, la operación es también importante. Fundado en 1889, Asahi, obtiene solamente el 10% del total de sus ingresos en el extranjero, y por tanto está expuesto a los riesgos de contracción en Japón, país de población declinante y de elevada edad, de acuerdo con un reporte de AFP.
Por ello, busca oportunidades en otros mercados; en los últimos años ha llevado a cabo adquisiciones en Asia y Oceanía, pero ahora quiere aventurarse más lejos.
"Añadir a su cartera dos marcas europeas que tienen una larga historia en la región, permitirá ampliar su estrategia y le ofrecerá nuevos canales de ventas para su marca de cerveza emblemática Super Dry", explicaba hace poco el diario económico Nikkei citado por AFP.
Asahi, que rivaliza en Japón con Kirin y Suntory, espera obtener una ligera mejora de sus resultados en 2016: prevé un beneficio neto de 80,000 millones de yenes (640 millones de euros), para un volumen de negocios de 1.87 billones de yenes (14,900 millones de euros).
