Publicidad
Publicidad

Los coches diésel, los nuevos villanos en Europa

Varias ciudades de la Unión Europea estudian prohibir la circulación de este tipo de vehículos, lo que ha despertado quejas en el sector automotriz.
vie 21 julio 2017 07:29 PM
Revisión
Revisión El ambiente en Europa se ha vuelto tenso, en medio de llamados a revisión de estos vehículos. (Foto: iStock/Alexey Bykov)

Los coches diésel se están convirtiendo en los villanos por excelencia en Europa, donde los escándalos en serie por la manipulación de las medidas de contaminación hicieron caer sus ventas y muchas ciudades están estudiando prohibir su circulación.

Las escándalos llegan uno tras de otro y este viernes el constructor de coches de lujo, Audi, anunció la llamada a revisión de hasta 850,000 vehículos diésel para limitar sus emisiones contaminantes.

Hace pocos días, su competidor Daimler, que se sospecha que manipuló un millón de coches, anunció medidas similares.

En el caso de Audi se trata oficialmente de instalar un nuevo programa informático en los motores para mejorar "el comportamiento de sus emisiones en condiciones reales de conducción".

Lee: Europa da luz verde a empresa conjunta de BMW, Ford, Porsche y Daimler

En paralelo, el semanario Der Spiegel que se publicará este sábado, revela la existencia de un cartel de los principales constructores alemanes, formado en los años 1990.

Publicidad

El objetivo era ponerse de acuerdo entre otras cuestiones sobre la reducción de emisiones contaminantes, algo que si se confirma sería una infracción al derecho a la competencia.

Según el semanario, se formaron 60 grupos de trabajo que reunieron a más de 200 empleados para tratar cuestiones como los motores diésel y gasolina, los frenos, los embragues, los sistemas de transmisión, pero también el sistema de subcontratos y precios.

Volkswagen, que originó el escándalo de los motores trucados en 2015, sigue haciendo frente a múltiples juicios en el mundo que le obligaron a reservar 20,000 millones de euros en sus cuentas.

En 2015 salió a la luz el 'dieselgate', la revelación de que Volkswagen manipuló once millones de vehículos para que parecieran menos contaminantes de lo que en realidad eran.

Desde entonces se sospecha que otros constructores de automóviles hicieron lo mismo .

Frente a las sospechas y a la lentitud de las autoridades alemanas, Bruselas está perdiendo la paciencia.

La comisaria europea de Industria, Elzbieta Bienkowska, acaba de pedir en una carta a los miembros de la Unión Europea que retiren de la circulación todos los vehículos diésel que no cumplan la normativa a final de año, según una copia del documento.

Este clima de desconfianza está teniendo consecuencias y en el primer trimestre del año, la cuota de mercado de los vehículos diésel en Europa cayó 2.5 puntos, según datos de la federación europea del automóvil (ACEA).

Prohibición de circulación

Varias ciudades de Europa, como el caso de Stuttgart y Múnich en Alemania, ya han prohibido la circulación de vehículos que usan este carburante o lo harán en breve.

Sin embargo las medidas son difíciles de aplicar porque todavía quedan muchísimos vehículos diésel en circulación en Europa.

Esta cuestión estará sobre la mesa de una reunión el 2 de agosto en Berlín entre representantes de los gobiernos regionales y de la industria del automóvil.

Por su parte, el presidente de Volkswagen, Matthias Müller, denuncia una "intensa campaña" contra los motores diésel que estaría afectando al sector.

"Se está siendo injusto con el diésel", afirma el directivo en una entrevista publicada este viernes por el periódico suizo Neue Zürcher Zeitung, y asegura que "las nuevas generaciones de diésel son muy buenas, sobre todo en lo que respeta al gas carbónico".

A la UE tampoco le gusta esta ofensiva contra el diésel. "Las restricciones en zonas urbanas a los vehículos deberían basarse en las emisiones y no sólo en el tipo de carburante", dijo un portavoz de la Comisión.

Bruselas teme en particular las consecuencias que tendría la rápida caída del mercado del diésel si se sigue prohibiendo su circulación. "Eso tendría como efecto dejar a la industria sin los fondos necesarios para invertir en vehículos de emisiones cero", destaca Elzbieta Bienkowska en su carta.
null

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad