“Las harinas en general registran un incremento de venta del 20%. Son de los productos que no se ocupan en el día a día, pero que se han vuelto más relevantes, debido a que los consumidores están buscando hacer cosas diferentes en la cocina”, explica Marianna Vargas, gerente de Comunicación y Marketing de la división Worldpanel de Kantar México.
Datos de la agencia global de investigación de mercados indican que las harinas se están desplazando más en tiendas de conveniencia y canales de cercanía como las ‘tienditas’ y en panaderías. Su consumo en autoservicios ocurre principalmente en quincena, periodo en que los hogares mexicanos realizan compras mayores.
Por otro lado, Nielsen reporta que los productos como los tintes para cabello y productos de coloración capilar han aumentado sus ventas en más de un 40% a nivel global. Por el contrario, la venta de protectores solares disminuyó 34%, la de labiales 22% y la de fragancias 4%. México no es la excepción en esta tendencia.
L’Oréal ha incrementado su producción de tintes para satisfacer la necesidad de más de 20 millones de mexicanas al día. En abril sus ventas duplicaron el total obtenido durante todo el primer trimestre del año, que corresponden a la categoría de coloración, cuidado capilar, cuidado de la piel y, en menor medida, maquillaje y fragancias.
“Sabemos que en México un salón de belleza tiene 80 clientes al mes y un tráfico de 78 millones de personas al año. La mujer mexicana va al salón al menos una vez cada dos meses. Por la cuarentena, hemos identificado que las mujeres se tiñen el cabello en casa. Se han atrevido a cambiar de tono y cuidan su aspecto para sentirse mejor anímica y emocionalmente”, dice Pablo Sánchez Liste, director de Comunicación, Asuntos Públicos, Sustentabilidad y Marketing de L’Oréal México.