López Obrador ha manifestado en reiteradas ocasiones que busca que Pemex, una de las petroleras más endeudadas del mundo y que no ha podido revertir una declinación en su producción de crudo y gas, recobre su papel de motor del desarrollo económico y su gobierno le ha inyectado ya millonarios recursos.
Si bien Yorio dijo que la posibilidad se está considerando "de manera seria" explicó que no se ha tomado ninguna decisión al respecto todavía.
Pemex pagó en 2019 casi 350,000 millones de pesos por el DUC, un 22% menos que el año anterior, según datos oficiales.
Este año, el Gobierno le otorgó un beneficio fiscal por 65,000 millones de pesos (3,200 millones de dólares) para reducir su abultada deuda, que rebasa los 110,000 millones de dólares.
El debate sobre aliviar la carga fiscal de Pemex no es nuevo, pero durante muchos años, el Gobierno ha llenado buena parte de sus arcas con los impuestos que paga la petrolera. Eso ha cambiado en los últimos años, debido a la baja en los precios del crudo y a la reducción en el bombeo de Pemex, que se ha quedado con unas endebles finanzas.
"Tenemos que ver el espacio (monto) que podemos absorber nosotros en nuestras finanzas públicas", agregó Yorio. "La evasión (fiscal) en México es cuando menos del 3% del PIB, en la medida en que tengamos espacio para bajarla (...) podríamos hacerle espacio a una reducción paulatina al DUC", subrayó.