Las ventas globales del grupo alcanzaron los 28,700 millones de euros (33,900 millones de dólares) en el primer semestre del año, un 53% más que en el mismo periodo de 2020, y 11% mayor respecto al año anterior.
Este crecimiento en las ganancias ha sido impulsado por la división estrella de LVMH, la de moda y marroquinería (creció 38% respecto a 2019), gracias a los resultados de marcas como Louis Vuitton, Dior, Fendi, Loewe y Céline.
El COVID-19 le pegó a la industria de lujo en 2020. De acuerdo con la consultora Bain & Company, el sector experimentó una caída de entre 25% y 30% en el primer trimestre del año pasado.
La industria comenzó a sentir las primeras afectaciones cuando el coronavirus se extendió por China, que representa 35% del mercado global del lujo y que fue el responsable de 90% del crecimiento del sector en 2019. Luego llegó a Italia y al resto de Europa, donde muchas marcas tienen sus sedes y están sus principales proveedores. Finalmente, afectó sus ventas en América.
La preocupación en el sector de lujo creció, además, porque las ventas de turismo se redujeron a medida que los aeropuertos y los vuelos fueron bloqueados. Según datos de Kantar, en marzo de 2020, las búsquedas en línea de artículos de lujo disminuyeron 76% y la duración de la sesión en los sitios de las marcas bajó 8.3% en comparación con enero.
Con información de AFP