Las salas de cine se debaten entre el optimismo y ómicron

La recuperación de la taquilla, visible en los números de la última entrega de 'Spiderman', enfrenta ahora el avance de los contagios de COVID-19 por la nueva variante.
Los cines dependerán de los estrenos y la evolución del COVID-19 para su recuperación.

Parecía que los casi dos años de pesadilla para las salas de cine en México estaban por terminar. Quienes aún no se habían atrevido a ir al cine ante el estreno de 'Rápidos y Furiosos 9' o 'Venom Carnage Liberado' no pudieron resistirse a 'Spiderman: No way home', que se convirtió en la película más taquillera de 2021 en el país, con 17.9 millones de asistentes en solo 15 días, ya que se estrenó el 15 de diciembre. Una cifra similar a la que congregó la tercera película más taquillera de 2019, 'El Rey León', estrenada en julio de ese año.

Sin embargo, el alto número de contagios por la variante ómicron del COVID-19 que se ha registrado en las últimas semanas obliga de nuevo a la industria a andar con cautela.

El Spiderman de Tom Holland trajo consigo la esperanza de que los próximos estrenos darán un impulso a la industria. Ramón Ramírez, director de Relaciones Públicas de Cinépolis, señala a Expansión que, el año pasado, 'Godzilla vs. Kong' recaudó 410 millones de pesos (cerró como la cuarta película más taquillera, según Canacine) y 'Spiderman' se convirtió en la película con la preventa de boletos más grande en la historia de Cinépolis en México, por encima de 'Avengers: Endgame'. “Si hay algo que le interesa ver al público en la pantalla grande, seguirá regresando a las salas”, afirma.

Los 300 filmes que llegaron a la pantalla grande en México en 2021 dieron un respiro a la industria, que cerró el año con ingresos por 7,495 millones de pesos, un incremento de 103% frente a 2020, pero que se queda 60.7% por debajo de los ingresos de 2019, el año previo a la pandemia.

Tábata Vilar Villa, directora de Canacine, considera que la industria dependerá de las cintas que lleguen a las salas. “Sin estrenos, somos una panadería sin pan, como ocurrió en la hibernación que vivimos durante 2020. Están las exhibidoras en continua comunicación con las distribuidoras para buscar lo mejor para ambos, con el mismo objetivo, que es vender boletos. Sin embargo, se entiende que si de pronto la gente deja de ir al cine y las autoridades cierran, muevan sus calendarios porque son películas muy caras para que no recuperen”, puntualiza.

El arranque de este año estará marcado por títulos como 'El callejón de las almas perdidas', de Guillermo del Toro, o 'Belfast', de Kenneth Branagh. En los siguientes meses llegarán 'The Batman', 'Red' o Morbius, con Jared Leto.

La amenaza de ómicron

Ómicron y la posibilidad de nuevas variantes del COVID-19 son el villano en esta etapa para la industria. En México, como en Estados Unidos o los países europeos, los contagios van en aumento, pero con un menor número de hospitalizaciones y decesos. Hasta ahora, algunos de los gobiernos locales han descartado los cierres, lo que da espacio para la recuperación.

Desde el inicio de la pandemia, los jugadores del sector han manifestado que están alineados con las indicaciones de las autoridades e implementado protocolos para que las salas de cine sean espacios seguros. La directora de Canacine comenta que la cámara espera que las autoridades eviten el cierre de actividades económicas en espacios cerrados y mantiene conversaciones al respecto con las autoridades.

“Esperemos que las autoridades no empiecen con cierres de cine. El tema es que piensan que espacio cerrado es igual a contagio y no es así de simple. En los cines la gente permanece en silencio, no hay interacción, no hay gritos y se han implementado estrategias con el aire en las salas”, añade.

Por ahora, Vilar Villa comenta que ve con optimismo que en Ciudad de México y Guadalajara se haya descartado los cierres, ya que en estas ciudades, junto con el Estado de México, se concentra la mayor parte de las salas. “Nuestra apuesta es que este año llegaremos a esos números prepandemia, aunque quizás no a las de 2019, porque fue un año atípico con mucha venta de boletos, se vendieron más boletos que nunca en la historia. Esperemos que este año se logre [la recuperación], pero todo va a depender de Ómicron; es muy difícil poder asegurar algo cuando estamos, pensado que esto va a acabar y llega otra cepa”, comenta.

Por ahora, la crisis por el COVID-19 llevó a las cadenas a replantear sus estrategias. “Las empresas vienen de una reestructuración financiera, y no solo es el tema de generar ingresos, vender tickets y que las empresas se mantengan abiertas. Si no se recuperan las entradas en 2022, las compañías van a empezar a enfrascar más su círculo de operación y hacer una reingeniería con el cierre de las salas de menor rendimiento”, opina Julián Fernández, analista en jefe de Leag Academy.