La estatal LitioMX está dando sus primeros pasos. La estructura de la compañía y la ruta a seguir serán aprobados tan pronto como la semana próxima, de acuerdo con fuentes cercanas al proceso.
El consejo de administración de la nueva estatal, conformado por cinco secretarias y secretarios del gabinete presidencial, tendrá su segunda reunión en los próximos días, en donde se tiene como agenda la aprobación del estatuto orgánico y la ruta de acción para que la compañía comience funciones.
Hasta ahora los pasos dados para la conformación de la empresa aún son pocos. El consejo ya se reunió en una ocasión, en septiembre pasado, para que Pablo Daniel Taddei asumiera la dirección del organismo, dijo hace unos días Rocío Nahle, secretaria de Energía.
El decreto de creación de la compañía fue publicado en agosto pasado, después de un cambio a la Ley Minera que avala que el Estado liderará todas las actividades relacionadas con el mineral, pero no se han presentado señales claras de que ésta esté operando. Hasta ahora, solo se conoce que la nueva estatal se instalará en Sonora, donde está la mayor número de yacimientos del mineral.
Pero hasta ahora, la compañía no ha dado señales de ya estar operando. Y el último presupuesto presentado por la Secretaría de Hacienda no incluye presupuesto para la compañía.
En el estatuto orgánico se definiría la estructura y el funcionamiento de la nueva estatal. Hasta ahora, solo se ha definido a LitioMx como un organismo descentralizado con autonomía operativa y personalidad jurídica propia, que será coordinado por la Secretaría de Energía.
En el decreto de su creación, se definió que la compañía quedaría a cargo de todas las actividades relacionadas con el mineral: desde la elaboración y planeación de los proyectos para la exploración, explotación y elaboración del litio, hasta generar información geológica.
El texto también habla de que la estatal administrará y controlará todas las actividades relacionadas con el litio y de la probabilidad de que pueda asociarse con otras instituciones públicas y privadas, pero no delimita el alcance. Estos puntos podrían quedar más claros con la próxima aprobación que haría el consejo de administración.
