El objetivo de la compañía es llegar a las 12,601 torres para dar cobertura a 118 millones de personas al término del sexenio de López Obrador. Actualmente Altán Redes, socio de la empresa y en la cual se apoya para avanzar en su plan de cierre de brecha digital, cuenta con 7,446 torres que, sumadas a las de CFE Telecom, ya tendrían un total de 11,623.
De acuerdo con un mapa de cobertura que CFE Telecomunicaciones que compartió con este medio, se detalla que, de las 4,177 torres, 3,862 aún están en construcción, mientras que 315 ya operan. La mayor parte de esta infraestructura se ubica en el centro sur del país, regiones a las que el gobierno ha dicho que quiere llevar servicios de conectividad.
Chiapas, Oaxaca y Veracruz son las entidades que tienen menor acceso a internet del país, según la ENDUTIH 2021, y a la administración solo le quedan dos años para llevar servicios de telecomunicaciones a aquellas zonas que aún no están conectadas.
“No puede aceptarse que más de 20 millones de la población mexicana no puedan acceder a un instrumento tecnológico, hoy un derecho fundamental. No hacerlo implicaría aceptar que estas personas queden marginados y significa que niños pueden quedar en desventaja por vivir en zonas en donde no se consideran rentables”, expresó Manuel Bartlett, director general de la CFE, el pasado 15 de febrero de este año en conferencia del presidente López Obrador.
A seis meses de que CFE Telecomunicaciones e Internet para Todos empezara a dar servicios de conectividad, ya cuenta con 6,493 usuarios, los cuales pertenecen a la modalidad de prepago, sin precisar si sus suscriptores efectivamente viven en zonas remotas, en donde aún no existe otro operador de telecomunicaciones que pueda ofertar servicios de conectividad.
Sin estrategia clara de seguridad
La instalación de torres supone ir a sitios de difícil acceso e, incluso, en donde aún no hay infraestructura de telecomunicaciones.
Para lograr el objetivo, el presidente señaló el año pasado que requeriría de todos los trabajadores y fuerza operativa de la CFE. Sin embargo, la inseguridad que azota al país ha empezado a ser un obstáculo para el despliegue de redes, cuya situación las mismas compañías de telecomunicaciones han reconocido y la empresa estatal también se enfrentará a este problema.
Expansión consultó a CFE Telecomunicaciones sobre la estrategia de seguridad que implementará para garantizar la seguridad de sus trabajadores, pero la compañía respondió que no cuenta con dicha información “por no ser de su competencia”.