Las declaraciones del CEO de Nissan se suman a las de Mary Barra, CEO de GM, quien a finales de enero también mencionó la posibilidad de trasladar producción de México a Estados Unidos si se llegaran a imponer aranceles.
Nissan y GM son los dos mayores fabricantes de vehículos en México, con tres plantas cada uno y un total de 40,000 empleos directos en el país: 15,000 en Nissan y 25,000 en GM.
Nissan opera dos plantas de ensamblaje en Aguascalientes y una en Morelos. En estas instalaciones produce el citycar March, los sedanes Sentra y Versa, el SUV Kicks y la pick-up Frontier. En 2024, la compañía fabricó 669,941 vehículos, un 8.8% más que el año anterior.
No obstante, Jeremie Papin, director financiero de Nissan, señaló en la conferencia que la caída en las ventas en Estados Unidos y los altos costos de los insumos han obligado a la empresa a revisar sus estructuras y procesos. “Estamos ajustando nuestra estrategia para mejorar la rentabilidad y asegurarnos de que nuestras operaciones sean lo más eficientes posible”, dijo Papin.
Las ventas de Nissan en Estados Unidos, que siguen siendo su segundo mercado más importante, han mostrado señales de debilidad. A pesar de que en el tercer trimestre de 2024 se experimentó un incremento del 10% en las ventas en comparación con el mismo periodo del año anterior, la compañía no ha logrado alcanzar las expectativas de crecimiento.
“En el tercer trimestre, las ventas fueron impulsadas principalmente por la liquidación de modelos 2024, pero la incertidumbre sigue siendo alta”, afirmó Papin.
Nissan exporta el 49% de su producción en México a Estados Unidos, principalmente los modelos Sentra y Kicks, fabricados en las plantas de Aguascalientes. Expansión buscó a la empresa para obtener detalles sobre la potencial reconfiguración de su producción en México de la que habló Uchida, pero no recibió comentarios hasta esta mañana.
Costos y demanda, las claves para definir cambios en la producción
Durante la conferencia, Uchida explicó que la decisión de cerrar o ajustar las plantas de producción dependerá de varios factores, entre ellos la demanda del mercado y la capacidad de producción. “Estamos evaluando la situación de nuestras plantas y tomaremos decisiones basadas en las necesidades del mercado”, explicó el CEO.
Aunque la empresa no ha revelado detalles sobre cuáles podrían ser las plantas afectadas, Uchida señaló que la compañía está monitoreando de cerca la situación y tomando medidas flexibles para adaptarse. “Las decisiones sobre las plantas estarán basadas en la evaluación de los costos y la demanda”, comentó Uchida.
Las expectativas de crecimiento para los próximos meses siguen siendo inciertas, lo que ha llevado a la compañía a centrar sus esfuerzos en la eficiencia operativa. “A pesar de la mejora, seguimos enfrentando desafíos y necesitamos ser más eficientes en el mercado estadounidense”, agregó el CEO.
Nissan también está implementando medidas para reducir su inventario en América del Norte, con la meta de bajarlo en un 20% entre finales de diciembre de 2024 y marzo de 2025.
Guillaume Cartier, director de desempeño de Nissan, destacó la importancia de lanzar productos en el momento adecuado y optimizar la producción para mantener una capacidad competitiva en América del Norte. “El enfoque está en tener los modelos correctos en el tiempo adecuado, y eso requiere una planificación eficiente”, expresó Cartier.
Para alcanzar este objetivo, Nissan ha lanzado nuevos modelos en Estados Unifos como Pathfinder, QX80 y el nuevo Kicks de manufactura mexicana, que se espera impulsen las ventas en ese mercado en el corto plazo. Además, la empresa planea lanzar el modelo Murano en el cuarto trimestre.