Publicidad
Publicidad

P&G recortará 7,000 empleos en medio de reestructuración y presión arancelaria

La empresa enfrenta un entorno adverso: ventas orgánicas en Norteamérica crecieron solo 1% y los aranceles de Trump presionan costos, obligando a subir precios en un mercado más competitivo.
jue 05 junio 2025 11:58 AM
Logo of Procter and Gamble.
Procter & Gamble emplea actualmente a 108,000 personas a nivel global.

Procter & Gamble recortará 7,000 empleos en los próximos dos años como parte de un programa de reestructuración que busca contener costos y responder a un entorno económico cada vez más adverso, según reportó el medio CNBC. El ajuste, que representa cerca del 15% de su fuerza laboral no relacionada con la manufactura, se enmarca en un contexto de desaceleración del crecimiento en su principal mercado, Estados Unidos, y de crecientes tensiones comerciales bajo la administración de Donald Trump.

El anuncio fue realizado por el director financiero de la compañía, Andre Schulten, durante su participación en la Deutsche Bank Consumer Conference. Según documentos regulatorios, la multinacional emplea actualmente a 108,000 personas a nivel global. Schulten reconoció que la decisión forma parte de un esfuerzo por garantizar la viabilidad del negocio en los próximos años, aunque admitió que no resuelve los desafíos inmediatos.

P&G, dueña de marcas como Pampers, Tide y Swiffer, enfrenta un entorno complejo. En su tercer trimestre fiscal, las ventas orgánicas en Norteamérica aumentaron apenas 1%, reflejo de una demanda contenida y un mercado más competitivo. A ello se suman los efectos negativos de los aranceles impuestos por Trump, que han obligado a muchas compañías a elevar precios para compensar mayores costos.

Publicidad

El impacto de los aranceles

La empresa anticipa que estos gravámenes tendrán un impacto directo en su rentabilidad. Según Schulten, los aranceles actuales representarán un lastre de entre 3 y 4 centavos por acción en las utilidades del cuarto trimestre fiscal. Mirando hacia el ejercicio 2026, la proyección es aún más severa: un golpe de 600 millones de dólares antes de impuestos derivado únicamente de las tarifas.

Ante este panorama, P&G ha iniciado una revisión a fondo de su portafolio de marcas, su cadena de suministro y su estructura organizacional. La intención es reducir costos, simplificar operaciones y abandonar mercados o categorías que no ofrezcan un retorno atractivo. La empresa prometió dar más detalles en su próxima llamada con inversionistas, programada para julio.

La reestructuración costará entre 1,000 y 1,600 millones de dólares antes de impuestos, según los cálculos preliminares. Estos montos se clasificarán como costos no recurrentes y no afectarán directamente las operaciones del negocio. Sin embargo, los analistas consideran que reflejan el nivel de presión que enfrenta la compañía para mantener su rentabilidad en un entorno incierto.

Schulten subrayó que el objetivo del programa es “proteger la capacidad de cumplir con nuestro algoritmo de crecimiento a largo plazo en los próximos dos o tres años”. Aun así, reconoció que el entorno actual sigue presentando “retos importantes”, especialmente en el corto plazo.

Una oleada de recortes

Procter & Gamble no está sola en esta estrategia. Otras grandes corporaciones estadounidenses como Microsoft y Starbucks también han anunciado recortes de personal este año, en respuesta a un enfriamiento del mercado laboral y a los crecientes costos operativos. Las tensiones comerciales y la política arancelaria de Trump han sido señaladas como factores clave detrás de estas decisiones.

Los inversionistas esperan con atención el informe de empleo de mayo que se publicará este viernes, en busca de señales más claras sobre el estado del mercado laboral estadounidense. Aunque el reporte oficial de abril superó las expectativas, los datos recientes de la firma ADP mostraron un débil dinamismo en la contratación del sector privado durante mayo.

Las acciones de P&G cayeron más de 1% durante la mañana posterior al anuncio, ampliando la baja acumulada en lo que va del año a 2%. En contraste, el índice S&P 500 ha subido poco más de 1% en el mismo periodo. La capitalización bursátil de la empresa ronda los 407,000 millones de dólares.

La presión sobre P&G llega en un momento en el que muchas compañías de bienes de consumo enfrentan el dilema de trasladar costos al consumidor o absorber el impacto en sus márgenes. En un contexto de inflación persistente y política comercial restrictiva, la segunda opción se vuelve cada vez menos viable.

El ajuste anunciado por P&G es, en palabras del propio Schulten, una medida necesaria para adaptarse a una nueva realidad de negocios. La compañía, que durante décadas ha sido sinónimo de estabilidad y liderazgo en el sector consumo, ahora debe lidiar con una economía más volátil y un consumidor más sensible al precio.

Más allá de los despidos, la decisión de replantear el portafolio y la red de operaciones podría marcar el inicio de una nueva etapa para el gigante estadounidense. Una etapa con menos empleados, menos marcas, pero también con un enfoque más selectivo y competitivo frente a sus rivales.

Publicidad

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad