Los problemas de la firma apuntan a un desafío más amplio, ya que sus homólogos del sector europeo tratan de navegar por el cambio global a los vehículos eléctricos mientras la feroz guerra de precios y la desaceleración económica china erosionan la demanda, sobre todo en las marcas de gama alta como Porsche.
La empresa matriz, Volkswagen, el mayor fabricante de autos de Europa, dijo que la revisión de sus productos le supondrá un golpe de 5,100 millones de euros (6,000 millones de dólares), lo que retrasará algunos modelos de vehículos eléctricos en favor de los híbridos y autos con motor de combustión.
El beneficio operativo de Porsche se reducirá en hasta 1,800 millones de euros este año. Porsche espera ahora que su margen de beneficios en 2025 no supere el 2%, frente a un rango previamente guiado del 5% al 7%.
Las acciones de Volkswagen también bajaban un 7.5%, en camino a su mayor caída desde 2023.
Algunos analistas creen que el recorte de las previsiones era inevitable, dada la presión sobre Porsche para que prolongue la vida útil de sus motores de combustión debido a la lenta demanda de vehículos eléctricos.