Publicidad
Publicidad

Susan Sarandon pensaba que su relación con Robbins duraría para siempre

La actriz confiesa que tras el dolor de la separación ha aprendido a que no se debe estar satisfecha con la vida porque "te estancas"
mié 06 octubre 2010 12:52 PM
Susan Sarandon
Susan Sarandon Susan Sarandon

Antes de que se separaran el año pasado, muchas personas pensaron que Susan Sarandon y Tim Robbins harían que su relación de Hollywood durara toda la vida. Y entre esas personas estaba la misma Sarandon, de acuerdo a la publicado por el portal People.com.

“Las personas se me acercaban en la calle y me decían: ‘Lloré y lloré cuando supe’”, le dijo la actriz al diario Telegraph. “Bueno, ¡yo estaba aún más triste! Nunca pensé que pasaría, tampoco”, recuperó People.com en su publicación .

Sarandon dice que la relación, que empezó en 1987 en el escenario de grabación de Bull Durham, simplemente se salió de su cauce. “Uno trae a las personas a su vida en ciertos momentos”, dice. “Tal vez en la relación tienen hijos, y te das cuenta que estás realizada, completa, después de ese punto”.

Sarandon, de 63 años, y Robbins, de 51, tienen dos hijos –Jack, de 21 y Miles, de 18- pero nunca se casaron. “Siempre me ha gustado la idea de escoger estar con alguien”, dice Sarandon. “Pensé que si uno no se casa, uno no da por sentado al otro tan fácilmente. No sé si luego de veintitantos años eso haya seguido siendo verdad”.

Pero no quiere hablar, dice People, sobre si ha elegido estar con alguien más en este momento, incluyendo a Jonathan Bricklin, de 31 años, su socio en SPiN New York, el bar de ping-pong de Nueva York. “Tienes que tener sentido del humor”, dice sobre las versiones que los relacionan. “Hay muchas personas en mi vida en este momento”.

Sarandon, que actualmente aparece en Wall Street: Money Never Sleeps, se describe a sí misma como una “monógama seria” y “una chica un poco hippie”, y dice que ha aprendido un par de cosas en el camino sobre los peligros de estar satisfecho, con el trabajo o con la vida.

Publicidad

“Tu relación con las personas o con tu trabajo tiene que ser un organismo en crecimiento”, dice. “No es algo en donde llegas a un cierto punto y luego empiezas a preservarlo. Tienes que cultivarlo, tienes que seguir curiosa y hambrienta y tonta. Una vez que dejes de hacer eso, estás satisfecha, y te estancas”.

No te pierdas de nada
Te enviamos un correo a la semana con el resumen de lo más importante.

¡Falta un paso! Ve a tu email y confirma tu suscripción (recuerda revisar también en spam)

Ha ocurrido un error, por favor inténtalo más tarde

Publicidad
Publicidad