El artista callejero británico Banksy trasladó su creatividad a Springfield este domingo al dirigir la secuencia de inicio de un capítulo de The Simpsons. Sin embargo, su visión no provocó la risa en todos los espectadores.
La secuencia abre con una cámara recorriendo las calles del pueblo ficticio de los Simpson, el paso de una valla con el grafiti Banksy y un aterrizaje en la Escuela Primaria de Springfield, donde Bart repite: "No escribiré en las paredes" sobre la pizarra y las paredes.
Bart, subido en su patineta, se dirige a la casa Simpson, para reunirse con sus padres, Homero y Marge, y sus hermanas, Lisa y Maggie, en el sofá para ver televisión. Después, la escena da un giro dramático.
De repente, la familia aparece en una pantalla gigante de una sombría fábrica de animación, donde trabajadores asiáticos dibujan deprimidos la caricatura de los Simpson mientras suena música tenebrosa. ¿Será una referencia al estudio de animación en Seúl, Corea del Sur, en donde se crea la serie de Fox?
Camisetas de los Simpson son transportadas por una fábrica tenebrosa, llena de ratas y esqueletos humanos, y donde se arrojan gatos a una máquina trituradora para hacer el relleno para muñecos de Bart Simpson, transportados a continuación por un panda.
La secuencia de Banksy termina con un unicornio malnutrido, atado a la pared, y que se utiliza para perforar los DVD de los Simpson. Una imagen del logo de 20th Century Fox rodeado de alambres de púas, reflectores y una torre de vigilancia, cierra la escena.