UNESCO busca detener el tráfico ilícito de bienes culturales en Egipto
Aunque la situación en Egipto parece estar más tranquila tras la salida del presidente Hosni Mubarak, la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) mantiene su preocupación por los objetos históricos en el país árabe.
El robo de varias piezas arqueológicas del Museo de Egipto y otros sitios a lo largo del país han motivado al organismo internacional a iniciar una búsqueda exhaustiva de este patrimonio que "forma parte de la historia de la humanidad y de la identidad de Egipto".
"No debemos permitir que caiga en manos inescrupulosas ni corra el riesgo de quedar dañado o, pero aún, destruido", señaló en un comunicado Irina Bokova, directora del organismo internacional.
A principios de febrero, la UNESCO hizo un llamado para que se protegieran los tesoros resguardados en los museos egipcios, luego de darse a conocer que saqueadores entraron al Museo de Egipto durante las revueltas en el país.
Imagenes de televisión mostraron vitrinas rotas, estatuillas hechas pedazos y dos momias destrozadas en el interior del recinto histórico tras los actos vandálicos.
El museo se ubica cerca de la plaza Tahrir, epicentro de las manifestaciones que pedían la renuncia del presidente egipcio.
La UNESCO pedirá la colaboración de la Interpol, la Organización Mundial de Aduanas, el Centro Internacional para el Estudio y la Restauración de Bienes Culturales (ICCROM) y el Consejo Internacional de Museos para impedir que las piezas robadas salgan de Egipto.
"Hagan todo cuanto esté a su alcance para recuperar estas valiosas piezas y devolverlas al lugar que les corresponde", señaló la UNESCO.
Al menos 17 obras fueron sustraídas del Museo de Egipto, entre ellas una escultura de madera de Tutankamón transportado por una diosa.