Lindsay Lohan no enfrentará cargos por pelea en centro de rehabilitación
Lindsay Lohan tiene un problema legal menos del cual preocuparse, después de que un fiscal decidiera no imputarle cargos en relación a un altercado ocurrido mientras ella estaba en un programa de rehabilitación por uso de sustancias, en diciembre del 2010.
Lohan, que enfrenta una audiencia preliminar en un cargo de delito grave por robo el 22 de abril, podría además, regresar a prisión por violación a su libertad condicional ese mismo día.
El fiscal de distrito del condado Riverside, California, decidió el martes no imputar un posible cargo de agresión contra la actriz, por un incidente ocurrido el 12 de diciembre de 2010 con Dawn Holland , un miembro del equipo del Centro Betty Ford, dijo el vocero del fiscal.
"Nuestra oficina ha revisado completamente el caso y no presentaremos cargos debido a falta de evidencia”, dijo el vocero John Hall.
Lohan ingresó voluntariamente al Centro Betty Ford en Rancho Mirage, California, para recibir rehabilitación por abuso de sustancias el 28 de septiembre de 2010, solamente días después de que se librara de ir a prisión por otra violación a su libertad condicional.
Un juez del condado de Los Angeles le ordenó posteriormente que permaneciera en el programa de rehabilitación hasta el 3 de enero, por reprobar una prueba de drogas mientras estaba en libertad condicional supervisada, por un cargo de conducir en estado de ebriedad en 2007.
Un incidente tres semanas después de que saliera de rehabilitación, condujo al último de sus problemas legales . Ella presuntamente salió de una joyería en Venice, California, usando un collar por el cual no pagó, de acuerdo con la policía.
Lohan rechazó un acuerdo con la fiscalía la semana pasada, fijando las bases para la audiencia preliminar del próximo mes y un posible juicio.
Sara Weisfeldt, de CNN, contribuyó a este reporte.