El festival de Cannes busca resplandor con las luminarias de Hollywood
Grandes personajes de Hollywood y algunos de los pesos pesados de la dirección independiente compartirán los focos en el Festival de Cine de Cannes de este año, que inicia el miércoles con la película de Woody Allen, Midnight in Paris.
En lo que los críticos prevén que sea una edición clásica del mayor escaparate del cine del mundo, se prevé que Angelina Jolie, Brad Pitt, Sean Penn, Penélope Cruz, Robert De Niro , Mel Gibson y Johnny Depp paseen por la alfombra roja.
Se les unirán los directores mimados del circuito de festivales europeos, como Pedro Almodóvar, Nanni Moretti, los hermanos Dardenne, Aki Kaurismaki y Lars Von Trier, que aspiran a la codiciada Palma de Oro a la mejor película.
Y el veterano cineasta estadounidense Terrence Malick vuelve finalmente a la competencia principal con su quinta obra, la muy esperada The Tree of Life, en la que Brad Pitt y Sean Penn protagonizan una historia familiar ambientada en el oriente estadounidense durante la década de 1950 que aborda la pérdida de la inocencia.
"Hay mucho alboroto y grandes expectativas", dijo el delegado general del festival, Thierry Fremaux, que fue criticado en los últimos años por lo que algunos consideraron una lista de estrellas de poco peso y que no estaba a la altura de lo que se esperaba.
Durante tres años, la crisis financiera internacional ha mellado el apetito de Hollywood por los caros viajes de promoción en el extranjero, pero los estudios parecen estar hambrientos por brillar en Cannes de nuevo.
" América está muy presente este año . Los estudios han vuelto: profesionales, agentes. Están en todos sitios en los hoteles", dijo Fremaux a Reuters.
Mientras yates de lujo se balanceaban en el puerto de la riviera francesa bajo despejados cielos azules, los preparativos de última hora para el maratón de películas del 11 al 22 de mayo estaban en marcha.
Carteles de películas adornaban hoteles de cinco estrellas a lo largo del paseo marítimo de la Croisette rodeado de palmeras, y bares, restaurantes y clubes nocturnos se preparaban para dos frenéticas semanas de fiestas nocturnas y grandes gastos.
