El terror de Almodóvar se 'cuela' como favorito para la Palma de Oro
El director español Pedro Almodóvar ha cautivado nuevamente a la crítica de Cannes con su película La piel que habito, una de las favoritas para competir por la que sería la segunda Palma de Oro para el cine español.
Antes de la presentación de este jueves, Almodóvar deslumbró en la alfombra roja del Festival, por la que paseó con su ecléctica elenco, formada por Antonio Banderas y Marisa Paredes, como vieja guardia; y Elena Anaya, Blanca Suárez y Jan Cornet como nuevas adquisiciones.
En el pasado, el ganador del Oscar había dicho que Cannes siempre era un buen motivo para ponerse a dieta, algo que este jueves confirmó haber conseguido parcialmente, pero aun así Pedro Almodóvar, con traje, camisa y corbata negros, brilló con sonrisa de satisfacción, con la que lanza su cuarto asalto a la Palma de Oro.
Con sus habituales gafas de sol —siempre se define como fotofóbico— se reafirmó como hijo predilecto del festival más prestigioso del mundo.
Almodóvar tenía fijación por esta historia que ha cobrado vida 10 años después de que el realizador manchego leyera Tarántula, la novela de Thierry Jonquet en la que se basa.
"Veía el vértigo en cara de todas las personas que forman mi staff al leer el guión, pero a mí me gustaba mucho y quería hacer esta película. Hasta ahora me he llevado por mi instinto y aquí estoy", explica en entrevista.
Y el resultado se vio al final de la proyección, con aplausos moderados y algunas risas durante la muestra, especialmente en momentos dramáticos, lo que dio la impresión de que la acogida no fue unánime, pero algunos medios internacionales apuntan a que esta 64 edición sea la de Almodóvar.
Por ejemplo, el diario británico Daily Telegraph mencionó que el nuevo filme del cineasta manchego es "su primera película de terror, un trabajo de un maestro en lo más alto de su arte".
La revista estadounidense especialista en cine Hollywood Reporter también sucumbe al encanto de la parte más tétrica. "Sólo alguien con tanto talento como Almodóvar podría haber mezclado esos elementos sin arruinar la película (...) nadie como él es capaz de ajustar la imaginería a las emociones".
"En su primera incursión en la ciencia ficción no abandona sus temas favoritos de identidad, ansiedad y traición", prosiguen, y dicen que la película demuestra que, pese a todo, "Almodóvar es siempre un bromista".
Peter Bradshaw, crítico del diario inglés The Guardian, da a la película cuatro estrellas sobre cinco y dice que "aporta algo hipnótico a la cirugía-porno ascética de su teatro quirúrgico de la crueldad: el látex, el acero frío y la carne. Es retorcida e insana y su coreografía de la autoposesión es magnífica".
También en Francia —el cineasta fue adoptado por esta nación— ha causado revuelo. Le Monde describió a La piel que habito como "la deslumbrante experiencia del doctor Almodóvar", y aunque reconocen el desconcierto por los riesgos no siempre bien ensamblados, "la maestría del director anima al espectador a reconsiderar el filme no como una historia, sino como un extraño y magnífico objeto que verá por primera vez una vez se haya quitado sus vendas".
Sin embargo, entre las alabanzas también están las críticas, como la hecha por otro medio francés, Le Figaro, menos entusiasta y que tilda al cineasta de "un Almodóvar menor" y, aunque destaca la interpretación de Elena Anaya y la factura visual del filme, considera que tiene "un guión totalmente confuso", que no es "habitado" por el genio del manchego. En un gratuito que se reparte durante el festival, le da la peor puntuación.
