El regreso del Hotel Geneve, un icono del lujo y el confort del Porfiriato
El legendario Hotel Geneve , construido en 1897 por los hermanos Gore en el corazón de la Zona Rosa de la Ciudad de México, se ha renovado para alcanzar una meta tan clara como ambiciosa: convertirse en un referente turístico de la ciudad.
El hotel, de 104 años de antigüedad, era considerado un icono a finales del siglo XIX y principios del XX por ser el primero en implementar los estándares de confort que poseen ahora los grandes hospedajes.
Cada habitación ya contaba con un baño completo con ducha, lavabo y sanitario, pero sin las jarras de agua, propias de la época. Disponían de agua caliente y fría, y espacios más amplios que los que ofrecían los hoteles europeos en aquel tiempo.
El lavado de cara que el Grupo Ostar, propiedad del empresario Carlos Slim, ha aplicado al Geneve desde 2007, ha implicado una restauración de todo el equipo. De calderas que trabajaban a base de petróleo, lavanderías de madera y tubería de cobre se pasó a sistemas modernos. La única norma era respetar el estilo clásico europeo con el que contaba desde un inicio, según detalla la revista Obras.
Grupo Carso Inmobiliario adquirió en 1991 Grupo Calinda, reestructuró la cadena y en 2007 vendió todos sus activos, excepto seis hoteles ancla bajo la marca Ostar Grupo Hotelero, entre ellos, el Geneve. Desde entonces, la preocupación de Roberto Slim Seade, director del grupo, ha sido devolverle al hotel su apariencia original.
En la restauración se cuidaron los tonos y los acabados conforme a la época de su creación; vitrales de plomo, pavimentos de mármol, así como herrajes originales que se conservan y otorgan un concepto diferente al hotel.
Los muebles, además de ser labrados a mano, están fabricados en madera de caoba y cedro rojo, y sus cajones se ensamblaron mediante cola de Milán sin clavo alguno.
"El reto ha sido estar al día con los cambios tecnológicos que han sido demasiado rápidos", explica Luis Felipe Barrera Amores, director de Operaciones de Ostar.
Otro de los retos de los directivos del Hotel Geneve es la recuperación de la zona en la que se encuentra, en el centro de la ciudad. El gobierno local cuenta con una serie de proyectos urbanísticos en Paseo de la Reforma, con un intento de equilibrar el área comercial y de viviendas, para recuperar la estética del Porfiriato en la Zona Rosa.
Sin embargo, según el director de Operaciones, los esfuerzos por rescatar esas calles no han sido a fondo, por lo que los negocios establecidos terminan por hacer mejoras a su modo y sólo en el espacio público que les corresponde.