La exesposa de Paul McCartney denuncia espionaje telefónico
El espionaje de medios sensacionalistas británicos ha alcanzado a otra celebridad del Reino Unido. Un mensaje de Paul McCartney para su exesposa, Heather Mills, fue extraído de su correo de voz en 2001.
Mills aseguró en el programa Newsnight de la BBC, que un importante periodista del grupo Mirror admitió haber intervenido su teléfono luego de citar partes del mensaje del exbeatle, aunque no reveló de quién se trataba.
Heather Mills encaró al periodista y le advirtió que si hacía algo con esa historia "iba a ir con la policía".
En respuesta a esta declaración, Trinity Mirror, la matriz del grupo Mirror, señaló que sus periodistas trabajan dentro de la ley y bajo los códigos de conducta de la Comisión de Quejas de la Prensa (PCC, por sus siglas en inglés), apuntó el sitio de la BBC.
La exesposa de McCartney rechazó que aquel periodista fuera Piers Morgan, cuyo nombre ha sonado tras los recientes escándalos por los escuchas telefónicas ilegales realizadas por personal del diario News of the World, propiedad del grupo News Corp de Ruppert Murdoch.
Morgan, conductor del programa de CNN, Piers Morgan Tonight, negó en julio las acusaciones de una parlamentaria de haber participado en la intervención de números telefónicos de celebridades cuando era editor del periódico Daily Mirror, en el mismo tiempo que se dio lo del mensaje de Paul McCartney.
De acuerdo con la BBC, el mensaje descrito por Mills corresponde al que Morgan confesó haber escuchado en 2006 en una nota de Daily Mail. El periodista de CNN lo calificó como "desgarrador".
Después de una discusión, el músico británico dejó a su entonces novia un mensaje en su teléfono mientras ella estaba de viaje en la India. McCartney le pedía que regresara con él. "Sonaba solitario, miserable y desesperado", citó la BBC el artículo del Daily Mail.
En el programa de la BBC, Newsnight, señala a otras figuras que creen haber sido espiados por Mirror Group, como el futbolista del Manchester United, Rio Ferdinand, quien asegura que en un artículo del Sunday Mirror en 2003 su fallo en pruebas de droga basado en llamadas y mensajes de texto del jugador.