Aretha Franklin evita una multa con el encanto de su voz
La Reina del Soul obtuvo un poco de R-E-S-P-E-T-O por parte de la policía la noche del lunes, de acuerdo con el periódico New York Post.
Esa noche cenó con su séquito en Neely’s Barbecue Parlor en Nueva York, y Aretha se dio cuenta de que una policía de tránsito la iba a multar por estar mal estacionada. Así que hizo lo que cualquier diva razonable haría: comenzó a cantar.
Después de la serenata, la oficial desistió de imponer la multa y en lugar de eso, le pasó un sobre a la estrella para que le diera su autógrafo.
Los dueños del restaurante, Pat y Gina Neely, estrellas de Food Network, también reconocieron a la cantante de soul y le regalaron un libro de recetas. Aretha ya tenía una copia, por lo que amablemente firmó el libro y lo devolvió.
