La Corte avala la ley que fija precios únicos para los libros en México
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) avaló este jueves la ley que ordena que los libros tengan precios únicos en todo el país, informó la institución a través de un comunicado.
En su sesión de este jueves, el pleno de la Corte determinó que la medida —contenida en la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro— no viola la constitución pues no favorece los monopolios.
“El establecimiento de un precio fijo de venta al público para el libro, a cargo del editor o importador, no propicia la creación de monopolios prohibidos por el artículo 28 constitucional, porque no se otorga a favor de determinadas personas el aprovechamiento exclusivo de ese producto, ni tampoco tiene el alcance de perjudicar al público en general o a cierta clase social”, resolvió el tribunal.
La votación en el pleno fue dividida: seis de los 11 ministros de pronunciaron a favor de la ley mientras cinco lo hicieron en contra, de acuerdo con la agencia EFE. El proyecto de resolución fue elaborada por la ministra Olga Sánchez Cordero, quien en su análisis consideró válido el precio único de los libros.
El Congreso mexicano aprobó en 2008 la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro, promovida por un grupo de editores y dueños de librerías pequeñas. Un proyecto similar había sido avalado en 2006, pero el entonces presidente, Vicente Fox, decidió vetarlo bajo el argumento de que favorecía los monopolios.
Los partidarios de la legislación argumentan desde entonces que el precio único en los libros permitirá a los pequeños libreros competir con las grandes cadenas —que compran ejemplares por volumen y pueden vender a un monto menor—, lo que favorecerá el establecimiento de más librerías en el país y, con ello, fomentar la lectura.
En 2003 existían solo 1,100 librerías en México, una nación con más de 100 millones de habitantes, indicó EFE citando datos del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta). La mayoría de esas librerías se ubica en las principales ciudades, como el Distrito Federal y Guadalajara.
Los representantes de las grandes cadenas, por el contrario, sostienen que el precio único afectará al consumidor final, que ya no tendrá varias opciones para adquirir ejemplares a menor precio. La Comisión Federal de Competencia (Cofeco) se ha manifestado en ese mismo sentido.
En 2010, la Encuesta Nacional de Lectura —elaborada por el Conaculta y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)— mostró que los mexicanos leen en promedio solo 2.9 libros al año. Poco más de la mitad de los encuestados dijo que lee libros, mientras el 42% declaró leer periódicos, el 39% revistas y el 12% historietas.