Imagen de Jackson desnudo muerto enmarca el día 10 del juicio de su médico
Los tres hijos de Michael Jackson “lloraron y lloraron y lloraron”, cuando el médico de la sala de emergencias les dijo que su padre estaba muerto, dijo Conrad Murray, médico personal del cantante, durante un interrogatorio con la policía dos días después de la muerte del ícono del pop.
Este martes por la mañana, los miembros del jurado escucharon los últimos 45 minutos del interrogatorio durante el décimo día del juicio por homicidio involuntario de Murray. El viernes se reprodujo la mayor parte de la grabación de audio.
Tal vez el momento más inquietante vino después, cuando se mostró en una enorme pantalla frente al jurado una fotografía del cadáver desnudo de Jackson sobre la mesa de autopsias. La fotografía se mostró durante el testimonio del patólogo que dictaminó que la muerte del cantante fue un homicidio.
La matriarca de los Jackson, Katherine, se sentó en la segunda hilera al lado de su hija Rebbie Jackson durante la primera hora de este martes y abandonó la sala antes de que se mostrara la fotografía.
El doctor Christopher Rogers, quien realizó la autopsia, dijo que calificó la muerte de Jackson como un homicidio por el uso imprudente de Murray del anestésico quirúrgico propofol en el hogar de Jackson para ayudarlo a dormir.
“El riesgo supera al beneficio” dijo Rogers.
Dijo que era posible que Murray le diera una sobredosis a Jackson , ya que no tenía un “dispositivo de dosificación de precisión”, para mantener dormido a Jackson con el anestésico.
“Esencialmente, el médico estimaba la cantidad de propofol que le daba”, declaró Rogers. “Creo que en esas condiciones sería muy fácil que el doctor calculara mal y suministrara demasiado propofol”.
Rogers reforzó el argumento de la fiscalía de que Murray usó un aparato intravenoso improvisado para mantener medicado al cantante.
La botella de propofol que los fiscales afirman que el acusado usó para el goteo intravenoso tenía un corte en la punta superior de goma que parecía haber sido hecho con un catéter, no con una aguja de jeringa.
Murray pudo presionar “una punta en el tapón de goma y entonces el propofol fluyó hasta terminarse”, dijo Rogers.
Rogers descartó la posibilidad de que Jackson se hubiera autoadministrado una dosis mortal del anestésico durante los dos minutos que Murray le dijo a la policía que estuvo lejos de la cama del cantante.