La Ciudad de los Libros: armonización de arquitecturas de tres siglos

Una primera gran hazaña cultural del siglo XXI fue como el cronista mexicano Carlos Monsiváis consideró alguna vez la idea de crear una Ciudad de los Libros y la Imagen, proyecto que a finales de este año podrá ser una realidad. 

La Ciudadela, un recinto de finales del siglo XVIII ubicado en el Centro de la Ciudad de México que durante casi siete décadas ha albergado a la Biblioteca de México José Vasconcelos y al Centro de la Imagen, será la sede de la nueva Ciudad de los Libros y la Imagen, por lo que se encuentra en un proceso de transformación para recuperar su esplendor.

La presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Consuelo Sáizar, aseguró en la presentación del proyecto de transformación de La Ciudadela que este recinto ha sido el emblema de la memoria y de la grandeza intelectual de México, y que con la ayuda de las innovaciones tecnológicas se busca continuar con esa tradición, ofreciendo una nueva forma de vivir la lectura para los usuarios.

Sáizar señaló que Vasconcelos visualizó en 1946 la creación de la biblioteca como un "faro" en su plan educativo y cultural que buscaba hacer extensivo en el país. 

Desde entonces, la biblioteca alberga los fondos Reservado y México que abarcan aproximadamente 450,000 volúmenes y atiende a cerca de 2,000 personas al día. Pero aquel espacio para la lectura y la investigación necesitaba una renovación, según apunta un comunicado de Conaculta.

"Al principio se estaban protegiendo (a los libros) de la intemperie; recientemente el cuidado que se da a los libros es mucho mayor, no solamente es dar cobijo, sino también protegerlas de la humedad, del polvo (...) la arquitectura de interiores, y en especial de las bibliotecas se ha perfeccionado", dijo a CNNMéxico el arquitecto Bernardo Gómez-Pimienta, que junto al arquitecto Alejandro Sánchez está encargado de llevar a cabo los trabajos de remodelación del edificio.

Según Gómez-Pimienta, la arquitectura debe ser un reflejo de la época en que se realiza, y en el caso de La Ciudad de los Libros debe reflejar la tecnología y los materiales de construcción que se utilizan en el nuevo siglo.

"Toda la arquitectura que no tiene ese complemento no es arquitectura, es una cosa que se llama escenografía", indicó Gómez-Pimienta sobre los nuevos implementos tecnológicos que harán diferente a la biblioteca.

La Ciudadela será el primer edificio del siglo XVIII que tendrá bajo consumo energético y de agua. Un recinto ecológico en cuya remodelación se contempla la implementación de jardines que revitalicen su imagen.

Otra de las innovaciones es el sistema bioclimático que permitirá un mejor preservación de los libros. Salas a 22 grados celsius y 50% de humedad forman parte del proceso renovador de la Bilblioteca de México. 

Para el arquitecto Alejandro Sánchez, "es un gran acierto que la infraestructura cultural se apoye en estos edificios que se revitalizan y se recuperan para darles otro uso y mantengan vivo el testimonio de la historia".

Sánchez es conocido por su experiencia en la intervención en recintos antiguos. "Una biblioteca del siglo XX, instalada en el siglo XXI, en un edificio del siglo XVIII, hay una mezcla de fechas interesantes, y eso es lo que hace muy rico el proyecto", dijo sobre el edificio de La Ciudadela que ha tenido varias intervenciones arquitéctónicas a lo largo de su historia.

"La Ciudadela se adecúa de manera fácil y natural a los libros, a todas estas bibliotecas, y todos los usos que están sumados en La Ciudad de los Libros, que son muchas cosas", dijo Sánchez.

La nueva Ciudad de los Libros y la Imagen contará también con una sala especial para gente con discapacidad visual, que podrán tener acceso a más fuentes de información apoyados de las nuevas tecnologías.

El arquitecto destacó la generosidad del edificio, al que calificó de vanguardista y cuya traza permite usarse de diversos modos.

Una biblioteca de bibliotecas

La renovación de la Biblioteca de México José Vasconcelos en la Ciudad de los Libros y la Imagen busca la preservación de las bibliotecas personales de figuras importantes de la cultura mexicana en el siglo XX.

Carlos Monsiváis, Alí Chumacero y Jaime García Terrés son algunos de los fondos bibliográficos que alimentarán la memoria de la nación que será la Ciudad de los Libros, en la que destaca la digitalización de algunas de esas bibliotecas. 

Para este proyecto, los arquitectos interpretan el "espíritu del personaje", involucrándose en su vida.

En el caso del arquitecto Alejandro Sánchez trabajar con el fondo bibliográfico del exdiplomático mexicano José Luis Martínez. Sánchez propuso trasladar el ambiente casero y familiar del intelectual al ámbito de la biblioteca.

"Las bibliotecas públicas son como muy dadas a organizarse en un solo espacio, y todo está a la vista (…) acá nos propusimos plantearnos una biblioteca con recorridos (…) trasladar el ambiente casero a una biblioteca pública, elegante, sobria, funcional, que te permita el recorrido y la sorpresa, como sucede en cualquier casa, descubriendo los espacios", señaló Sánchez sobre esta colección, que es una de las que últimas que se han adquirido y que cuenta 73,500 materiales bibliográficos, gran parte sobre literatura mexicana del siglo XX.

En el plan maestro que llevan a cabo Alejandro Sánchez y Bernardo Gómez-Pimienta —encargado de la colección bibliográfica del exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México, Antonio Castro Leal— han aprovechado los espacios que dejó la última remodelación de Abraham Zabludovsky, en una forma de armonización de la arquitectura del siglo XVIII y XX.

"No estamos peleados con nadie, al contrario, en muchos sentidos estamos conciliando las dos arquitectural a través de nuestra propuesta y aprovechándolas", aseveró Sánchez.

El proyecto de la Ciudad de los Libros y la Imagen está contemplado terminarse para finales de otoño de este año. En el también se contempla la remodelación del teatro polivalente, una ludoteca, una sala infantil, y la apertura de una librería y cafetería.