Los momentos de tranquilidad de los Rolling Stones en fotografías inéditas
Nota del Editor: CNN Photos es el primer medio en publicar 12 fotografías nunca antes vistas de los Rolling Stones, las cuales fueron tomadas por Jim Marshall durante su gira de 1972. Puedes ver las fotografías en el blog de CNN Photos aquí .
(CNN) — Basándose en la expresión seria que tenía Mick Jagger y la mirada fija en Keith Richards, era claro que la presión era mucha.
Era el verano de 1972 y los Rolling Stones estaban en su gira por Estados Unidos para promocionar su aclamado disco Exile on Main Street. Pero cuando no estaban sobre el escenario tocando y divirtiéndose con sus admiradores, estaban trabajando duro en los estudios Sunset Sound, en Hollywood, para remezclar algunas canciones.
Eran tiempos duros llenos de fiestas y sesiones de grabación, y solamente una persona estuvo ahí para capturar todo íntimamente, el afamado fotógrafo musical Jim Marshall, quien cubría la gira para la revista Life.
Ahora, el patrimonio Marshall está dando a conocer fotos nunca antes vistas de la banda a través del libro The Rolling Stones 1972 (Los Rolling Stones en 1972, Chronicle Books), el cual saldrá a la venta el 15 de agosto.
Habrá una presentación en la Galería Steven Kasher de Nueva York que estará del 5 de julio al 8 de septiembre, además de una exhibición en el Museo EMP de Seattle, la cual abre el 14 de julio.
Algunas de estas tomas se muestran exclusivamente a través del blog de CNN Photos. Esta presentación no pudo haberse presentado en mejor momento, ya que los Rolling Stones recientemente anunciaron la celebración que enmarcaría su 50 aniversario este año.
Amelia Davis, fotógrafa que trabajó como asistente de Marshall, es la única dueña del material fotográfico Jim Marshall , ya que Marshall murió en 2010.
Trabajar con Marshall y ayudarle a archivar su trabajo le permitió a Davis conocer muchas de sus historias y profundizar en su memoria. Davis dijo a CNN que lo que hacía únicas las tomas de Marshall es que él siempre exigía tener acceso total a las estrellas de rock.
“Él realmente estaba dondequiera que estuvieran las estrellas, ya fuera en el camión que los transportaba durante la gira o fuera del escenario”, dijo Davis. “Siempre tenía su cámara a la mano, y la gente en cierto modo la ignoraba. La cámara era como una extensión de él. Tenía la habilidad de actuar como si fuera una mosca en la pared”.
La habilidad de Marshall de camuflajearse para no interrumpir la dinámica de la banda también le permitió vivir la experiencia de vivir una gira con los Rolling Stones, dijo Davis.
“Realmente sentó un precedente de las giras de las estrellas del rock”, dijo. “Tenían su propio avión, muchas drogas y mucho alcohol disponible. Simplemente era algo alocado, muchas cosas sucediendo”.
Davis dice que la fuerte personalidad de Marshall, su intensa pasión por la música y su empuje por lograr las mejores tomas mientras mantenía la camaradería lo hicieron relacionarse con músicos como Richards.
“Él era su amigo”, dijo. “Festejaba con ellos. Contaba con su confianza. Como dijo Keith en el prefacio del libro, dentro de la gira él era otro miembro de los Rolling Stones”.
Pero lo que más disfrutaba Marshall era fotografiar los momentos tranquilos, cuando los músicos se quitaban su máscara de artistas y simplemente eran ellos mismos, dijo. Lo único que uno tiene que hacer es ver las fotos de Jagger sobre el escenario y fuera de éste para ver que se trata de personas diferentes.
“Mick estaba muy enfocado al negocio”, dijo Davis. “Mick era mucho más serio que Keith. Eso es lo que mucha gente no ve: que él es el empresario de la banda”.
Davis dijo que mientras Marshall pasó poco tiempo siguiendo a los Stones, fue tiempo más que suficiente para que entablara amistad con algunos de los miembros, especialmente con Richards.
Pero la tarea más importante que realizó Marshall durante su carrera, ya sea durante el último concierto de los Beatles en 1966, o en la presentación de Jimi Hendrix para el Monterey Pop Festival en 1967, era la de capturar la música como un sentimiento, una tarea que podría parecer imposible.
“Jim siempre trataba de mostrar la verdadera cara de lo que fuera que fotografiara”, dijo Davis. “El rompía con los estereotipos de cómo deberían verse las estrellas de rock. Él decía: ‘yo era un historiador con una cámara y no me daba cuenta de eso’. El fotografió pedazos de la historia”.