Arqueólogos descubren nuevos vestigios en El Tajín con el uso de sensores
Oculto entre la vegetación de la zona arqueológica de El Tajín, en el estado de Veracruz, se encuentran tres canchas de juego de pelota, un par de edificaciones a gran altura conocidas como balcones y un área habitacional de más de 1,000 años de antigüedad, dieron a conocer este viernes arqueólogos mexicanos.
Los especialistas realizaron el descubrimiento mediante el uso de sensores remotos y de teledetección, y su existencia será corroborada con excavaciones arqueológicas, señaló el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en un comunicado.
La doctora Guadalupe Zetina Gutiérrez, investigadora de la zona arqueológica y especialista en sistemas de información geográfica y sensores remotos explicó que la tecnología usada en la investigación consta de la combinación de tres técnicas juntas, siendo el grupo a su cargo pionero en México en aplicar esta metodología.
Se trata de la ortofotogrametría, que consiste en tomar fotos aéreas, el LiDAR o escáner láser para detectar elementos y generar imágenes digitales y la termografía o cámara térmica para conocer etapas constructivas o grietas dentro de los edificios.
“Es una nueva era para la arqueología en México, que rompe con el esquema del trabajo arqueológico. Ahora primero determinamos, a partir de imágenes digitales en dos y tres dimensiones, dónde están los vestigios, para así dirigir los esfuerzos concretamente, de esta forma se avanza más rápido en las exploraciones”, señaló Zetina Gutiérrez, de acuerdo con el comunicado.
Además de la localización de los vestigios que aún están ocultos por la vegetación en la zona ubicada en Papantla, Veracruz, el uso de esa tecnología permitió a los arqueólogos mexicanos determinar que las antiguas edificaciones del área abierta al público, y considerada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, guardan buen estado de conservación.
“En total se tomaron 60,000 imágenes termográficas, y resultó beneficioso ver que no ha habido perturbaciones para las estructuras principales de la zona arqueológica”, señaló la especialista.
Con la detección de las tres nuevas canchas de juego de pelota, el número total de esas estructuras que han sido encontradas en El Tajín asciende a 20 y la cantidad podría aumentar porque solo se ha estudiado las partes sur y norte de la zona arqueológica, dio a conocer el INAH.
Los dos “balcones” descubiertos son plataformas de aproximadamente 10 por 15 metros de base y de 10 a 12 metros de altura, ubicados en partes altas de la antigua ciudad que fue capital del imperio Totonaca, desde los cuales se tiene una vista panorámica del sitio. Los arqueólogos desconocían su existencia en el lugar, dio a conocer el INAH.
“Hasta ahora se ha determinado la existencia de dos, aunque podría haber más; por el momento se estudian sus características a través de modelos digitales en tercera dimensión, y será con excavaciones como se podrá determinar el uso que tuvieron, aunque es seguro que debieron funcionar como ejes visuales”, dijo Zetina Gutiérrez.
Por último, los arqueólogos detectaron la existencia de antiguas áreas habitacionales en la parte occidental del área, en las que probablemente vivieron familias extensas y que permitirán investigar cómo vivieron los habitantes de la majestuosa ciudad.
Estos descubrimientos se unen a los ocurridos en Chichen Itzá, Yucatán, donde en enero, un grupo de arqueólogos encontró una decena de entierros de hace más de 1,000 años el sitio maya de Xtojil.
Así como a los del Templo Mayor, ubicado en la Ciudad de México, donde en octubre de 2012 arqueólogos del INAH encontraron 45 cráneos humanos y alrededor de 250 mandíbulas inferiores que pudieron ser una ofrenda para clausurar una edificación prehispánica.
