¿Quién tiene los derechos de autor de la canción 'Happy Birthday'?
La empresa Warner/Chappell Music reclama los derechos de autor de la canción Happy Birthday, que tiene 120 años y 16 palabras, y es el tema más conocido del idioma inglés, indicó un reporte de CNNMoney.
Sin embargo, una demanda federal, presentada en una corte de Nueva York, busca que la canción sea libre.
Warner/Chappell Music pide obtener cierta cantidad de dinero cada vez que canten el tema en un programa de televisión o película, aunque no reclaman que ocurra lo mismo cuando un individuo la entone en una fiesta infantil.
Pero la productora Good Morning To You Productions, que elabora un documental sobre la canción, emitió una demanda el jueves pasado, con el objetivo de que la canción regrese a dominio público.
Ellos indican que los derechos de la canción expiraron en 1921, y que no deben pagar 1,500 dólares para poder utilizarla en su película.
Warner/Chappell Music es el brazo de difusión musical de Warner Music Goup, detalla CNNMoney. En la demanda se precisa que la canción Happy Birthday fue escrita por Mildred y Patty Hill, y luego vendida a Clayton Summy en 1893, por 10 % de las ventas de la partitura.
La compañía que fundó Summy, fue comprada después por Warner Music Group, en 1998.
La demanda argumenta que, si Warner/Chappell es dueña de algún derecho, solo es sobre un arreglo en piano de muy limitada difusión, publicado en 1935, y no de la canción misma.
El proceso legal busca que Warner/Chappell regrese todos los millones en pagos que ha recibido: más de 2 millones de dólares anuales por las tarifas de derechos relacionados con Happy Birthday.
Las personas que cantan Happy Birthday a sus familiares en sus casas están específicamente exentas del pago, dijo Robert Brauneis, profesor de derecho de la Universidad George Washington.
Pero quienes cantan la canción en una fiesta , en un lugar público, como restaurantes y centros de entretenimiento familiar, técnicamente están obligados a pagar, explicó a CNNMoney.com.
Según el experto, no vale la pena para Warner/Chappell intentar recibir pago por ese tipo de “presentaciones”. Pero la polémica sobre la canción de cumpleaños continuará, al menos hasta que la corte llegue a una determinación.