Artistas y amigos homenajean a Chavela Vargas a un año de su muerte
Un sillón vacío y una mesa con vasos de tequila en el escenario sirvieron para representar a Chavela Vargas en un concierto para conmemorar el primer año de su muerte.
El evento que incluyó varias presentaciones se llevó a cabo este lunes en el Lunario del Auditorio Nacional de la Ciudad de México, ante 500 personas.
Los cantautores Inma Serrano, María Elena La Negra Chagra y Tontxu, la escritora María Cortina, los compositores Edgar Oceransky y Mario Ávila, el cantante Fernando del Castillo El Chino, los guitarristas Miguel Peña y Juan Carlos Allende y el bailador Rafael Amargo asistieron al homenaje, una iniciativa de la Oficina Cultural Española de la embajada en México.
La chamana es un "referente, además de artista (por su) modo de hacer y su personalidad", dijo Serrano en entrevista. La llamada Voz del Mediterráneo condujo el evento.
Ella conoció a Chavela en 1992: "Impactaba tanto en distancia corta como en larga".
Serrano abrió el homenaje con Te esperaré una vida, Amanecí en tus brazos y Cruz de olvido.
Miguel Peña y Juan Carlos Allende, conocidos como Los Macorinos tras actuar desde 2003 con la artista, también estuvieron en el escenario. Peña dijo que con Chavela aprendió a acompañar mejor a los cantantes, pues ella era "impredecible en sus compases".
Mario Ávila ofreció dos canciones: Chavela, niña, recordando a "la niña dolorida" que la artista mexicana nacida en Costa Rica siempre llevó consigo, y A dónde te vas, paloma, que tras su muerte "se vuelve como un saludo y una despedida".
Tontxu y Edgar Oceransky representaron sobre el escenario la unión de los dos países por los que Chavela Vargas declaró su amor : el país al que dedicó sus últimas palabras ("Me voy con México en el corazón") y España, que reconocía como su "tierra".
Los artistas español y mexicano, respectivamente, cantaron Piensa en mí y Un mundo raro.
Fernando del Castillo, quien escribió con la artista el libro Dos vidas necesito. Las verdades de Chavela, cantó Desde el abismo.
La última en aparecer fue La Negra Chagra. Con Nos soy de aquí, ni soy de allá recordó la interpretación que junto con Chavela Vargas hizo en 2004 en el Luna Park de Buenos Aires, de la que Inma Serrano recuerda que el estadio "se caía" por la entrega del público.
En un último intento de revivir en el recuerdo a "La Chamana", los artistas brindaron por Chavela y entonaron uno de sus mayores éxitos: Ponme la mano aquí, Macorina...