Jóvenes y escritores despiden con rosas blancas a José Emilio Pacheco
Una mujer reparte rosas blancas a desconocidos que acuden al velorio de José Emilio Pacheco, un homenaje que para ella representa lo que este escritor mexicano dio a cada uno de sus lectores sin conocerlos.
En una carta en la que Pacheco rehusó dar una entrevista, escribía: "me parece un milagro que algún desconocido pueda verse en mi espejo (…) Usted que me ha leído y no me conoce, no nos veremos nunca pero somos amigos".
Norma Mayoral, empleada de una panadería, no es una lectora asidua, aunque Las Batallas en el desierto es un libro que marcó su vida en la adolescencia y sus años de estudiante en el Colegio de Ciencias y Humanidades de la UNAM.
Por eso le da flores a los jóvenes que entran a la Aula Magna del Colegio Nacional donde al mediodía de este lunes llegó el féretro con los restos de Pacheco, fallecido el domingo a los 74 años.
Un público, en su mayoría jóvenes, se acercaron con esas rosas blancas con las que harían la guardia al lado del féretro de José Emilio Pacheco, con el escudo del Colegio y su lema "Libertad por el saber", una frase congruente a lo que la obra del autor de El principio del placer hizo sentir a sus lectores.
"Lo que estamos presenciando aquí en el Colegio Nacional es triste pero a la vez conmovedor; un río de gente que puedes estar viendo, lectores de José Emilio que hubieran querido saludarlo y que viene a darle un sentido adiós", aseguró a CNNMéxico el escritor y periodista Rafael Pérez Gay.
El historiador Enrique Krauze fue el único que habló en el velorio, lo que llamó "un privilegio doloroso", reunido con funcionarios de la cultura como el presidente de Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa, además de sus amigos Elena Poniatowska, Eduardo Lizalde, Benito Taibo y Jaime Labastida.
Krauze lo recordó como un poeta que no se refugió en una "torre de marfil", preocupado por las problemáticas sociales del país, y "un custodio de ese jardín armonioso que fue la literatura mexicana".
Elena Poniatowska dijo que con la partida de Pacheco "se pierde un pilar de la poesía en México", de una poesía "que estaba ligada a la gente de la calle, a todos nosotros, pero también una poesía muy culta", según un reporte de la agencia EFE.
Poniatowska difundió un comunicado en el que aseguró que la ceremonia en la que recibiría la Medalla de Bellas Artes, este martes, sería suspendida hasta nuevo aviso por la muerte de Pacheco.
Con su rosa blanca en las manos, Andrés Tapia, profesor de música, se lamentó de no leer mucho, pero aseguró que en José Emilio Pacheco encontró algo diferente a otros escritores.
"Como un medio lector que no le ha echado las ganas te puedo decir que lo más especial hasta la fecha ha sido él, me ha hablado en primera persona y me siento reflejado en algún momento y me sigo sintiendo así".
Las fila de admiradores de Pacheco seguía creciendo alrededor del balcón que rodeaba uno de los jardines de la casa virreinal donde se asienta el Colegio Nacional, en el Centro Histórico, y en el que el escritor formaba parte desde 1987.
Cristina Pacheco aseguró a medios que los restos de su esposo serán incinerados y probablemente esparcidos en Veracruz, uno de los escenarios de sus obras.
En una entrevista previa, Cristina Pacheco dijo que su esposo se durmió, “plácido, tranquilo”, y ya no despertó .