Cómo hacer 'convivir' a NIN, Arcade Fire, Zoé y los Tigres en un escenario
Un escenario de 28 metros de largo por 24 de ancho será el espacio que ocuparán Los Tigres del Norte, Nine Inch Nails, Zoé y Arcade Fire en el Vive Latino este fin de semana.
Los organizadores esperan que más de 200,000 personas presencien las actuaciones de estos cuatro grupos que tienen una esencia diametralmente distinta y que además de en su música, se verá reflejada en la iluminación y el diseño de la escenografía.
Si normalmente cada uno de estos grupos requiere poco menos de una semana para instalar sus escenarios, el área de producción del Vive Latino solo tendrá algunas horas para que los escenarios reflejen su estilo musical.
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“Todos quieren venir con su propio show, pero desgraciadamente no es posible. Tenemos un solo espacio para cierta cantidad de bandas. Lo que hemos implementado hace un par de años, es que el diseño de iluminación se cambia conforme al headliner y obviamente se ofrece, checando los diseños de las demás bandas que tocan de noche, entonces se hace un gran diseño de iluminación para las que tocan de noche tengan prácticamente su diseño o lo más cercano a su diseño”, dice en entrevista Lourdes Skipsey, encargada de producción del Vive Latino.
“Lo que es video se implementa de parte del festival lo usen o no las bandas, tengan contenido o no, para que el público tenga mejor visibilidad y si estás atrás tenga pantallas para ver acercamientos de los músicos, etcétera”.
Skipsey ha producido las 14 ediciones del festival, desde que inició en 1998 con 20 agrupaciones. Para este año, el Vive Latino tendrá 173 bandas distribuidas en siete escenarios a lo largo de cuatro días.
Según datos de los organizadores, para el montaje del evento se requirieron de 1,200 personas que trabajaron durante 64 horas, 120 tráileres y 220 bocinas.
Sin embargo, a pesar de que las labores en el Foro Sol comenzaron esta semana, el proceso de planeación inició hace más de cuatro meses, previo al anuncio de este Vive Latino, que se realizó el 9 de diciembre de 2013.
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“Empezamos como en septiembre, más o menos en septiembre, octubre a empezar a planear cuántos escenarios, en dónde, las ubicaciones, los equipos.
“Ahí iniciamos, dependiendo de los headliners, y de cuántos escenarios, a empezar a repartir equipos, si vamos a hacer cambios en los montajes, a achicar, a agrandar, y a hacer la logística del montaje y los días de show”, señala Skipsey, quien también realiza la producción del festival Corona Capital y de grupos como Rolling Stones, U2, Coldplay, entre otros, cuando visitan México.
¿Y el costo? Skipsey asegura que no es fácil tener este número en la cabeza. “Son muchos días, muchos equipos, muchos escenarios, mucha comida, muchos hoteles, mucho de todo” y este año, agrega, se complica más. “Lo más difícil del Vive Latino es hacer un festival con cuatro días corridos”.
