Justin Bieber deberá pagar 80,900 dólares en restitución por el daño causado a la mansión de su antiguo vecino a la que arrojó huevos.
El cantante canadiense aceptó un acuerdo con la fiscalía para resolver la acusación en su contra por vandalismo, lo que lo deja en libertad condicional por dos años.
El periodo a prueba será supervisado hasta que complete 12 sesiones semanales de control de la ira, ayude cinco días en trabajo comunitario y pague la multa.
La sentencia también indica que Bieber debe permanecer por lo menos a unos 100 metros lejos de la familia que fue víctima de su 'broma'.
Bieber debe también informar al oficial de libertad condicional si es deportado o si sale del país, dijo el juez de la Corte Superior del Condado de Los Ángeles, Leland Harris.
"Justin se alegra de haber resuelto el caso y lo respalda", dijo su representante en un comunicado. "Va a continuar enfocándose en su carrera y su música".
El cargo por delito menor fue presentado este miércoles por la mañana por el fiscal de distrito del Condado de Los Ángeles, cinco meses después de que el investigador del alguacil pidió que fuera acusado de un delito grave.
El caso de vandalismo es lo que los abogados llaman un "wobbler", es decir, un acto por el cual el fiscal de distrito tiene la opción de procesar al agresor bajo un delito grave —que le traería consecuencias más duras al cantante— o como un delito menor.
Luego de que Bieber puso en venta la mansión en Calabasas, la propiedad fue adquirida por Khloe Kardashian.
Por otra parte, el cargo de conducción bajo influencia de sustancias que enfrenta Bieber se encuentra pendiente, aunque una fuente cercana al caso dijo que las negociaciones están en marcha para llegar a un acuerdo con la fiscalía y evitar un juicio.