Los temas del primer número de la revista Expansión, el 29 de enero de 1969, eran los temas de negocios del momento en México: la novedosa, y polémica, introducción de las computadoras al mundo corporativo, la llegada del invento que revolución la logística comercial en todo el mundo: el contenedor, y la industrialización del campo.
El mundo vibraba como nunca ese año . Movilizaciones sociales, intervenciones militares, monarquías derrocadas por nacientes dictadores y los primeros brotes de la tecnología que llegaría para transformar la vida de todos.
Computadoras al alcance de la sociedad, la creación en ese mismo año de Arpanet (Advanced Research Projects Agency Network), que daría vida a internet en la década de los 90, y las primeras transmisiones de televisión en vivo ocupaban los titulares del mundo.
En este entorno nació Expansión . En su primer número exponía el creciente uso de las computadoras en México y abrió, desde un inicio, espacio a voces diversas. Igual a un gerente administrativo que advertía que su empres no gastaría “pólvora en infiernitos”, en referencia a la llegada de los ordenadores, mientras que un visionario director firmaba un contrato millonario con IBM y hablaba ya de un “sistema de facturación on line”.
También anunciaba la llegada del container , “La última moda en el transporte de carga”.
“Transportación Marítima Mexicana está por recibir dos grandes barcos cargueros construidos en Yugoslavia y diseñados específicamente para el uso del sistema de containers”, cita el reportaje.
El mundo, que anhelaba eliminar fronteras para compartir bienes, no requería más que una solución práctica. Esto fue lo que se logró con la introducción del contenedor.
No obstante, señalaba también los problemas: “la política seguida por los sindicatos de estibadores, la falta de equipo adecuado para el manejo de containers en puertos mexicanos, así como deficiencias en el servicio aduanero”.
Hoy, en el siglo XXI, hablamos de manufactura aditiva e inteligencia artificial para agilizar los procesos logísticos, justo cuando el proteccionismo comercial amenaza con regresar.
En el campo mexicano, por otra parte, el gobierno buscaba la fórmula para reducir el sub-empleo entre la población rural, mediante el establecimiento de industrias locales, explicaba el artículo ‘La mini-industria: nueva esperanza para el campo’.
Otra noticia interesante: la revisión salarial de 16% que lograron hace 45 años los trabajadores y que fue relevante en el contexto de aquel entonces como es ahora. En especial, frente al ajuste salarial recientemente anunciado para 2014 por la Comisión de Salarios Mínimos, que se limitará a 3.9%, lo equivalente a 2.50 pesos diarios adicionales.
Los privilegios que arrojaba el México del “desarrollo estabilizador” de los años 60 se consumían y pocos meses después verían su fin.