Emprendedora: escala tu negocio como lo haría 'Cenicienta'
Había una vez una princesa que quería tener una empresa. Con un poco de ayuda y mucha perseverancia lo consiguió y fue exitosa para siempre.
Así es el tono en la narrativa del libro Fairy-Tale Success: A Guide to Entrepreneurial Magic ('Éxito de cuento de hadas: Una guía de magia empresarial'), un libro que escriben la comunicóloga experta en relaciones públicas Adrienne Arieff y la escritora Beverly West.
Las autoras afirman que todas las mujeres pueden ser protagonistas de su propio cuento de hadas y tener un final feliz, sólo deben creer en ellas y escoger bien a su hada madrina.
Aunque esto podría sonar infantil, y hasta rayar en lo cursi, Fairy-Tale Success muestra por qué las princesas de los cuentos de hadas pueden ser un ejemplo a seguir para crear una empresa y hacerla crecer, según una reseña del texto publicada por la revista Expansión, cuya suscripción está disponible en el Kiosco Digital de Grupo Expansión.
La gestión en los cuentos de hadas
Dos años atrás, Erika Andersen publicó Leading so People Will Follow ('Liderando para que la gente te siga'). En este libro, la experta en liderazgo dedica un capítulo al análisis de los cuentos de hadas como mapas que contienen claves para los líderes.
Según Andersen, un líder puede aprender de las historias que muestran cómo un hombre común puede matar a un dragón, rescatar a una princesa y convertirse en un rey.
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De modo similar, el artículo What Careers Would These Fairy Tale Characters Have In Real Life?, del sitio web Business Insider, analiza qué trabajos tendrían los personajes de algunos cuentos de hadas y los sitúa en distintas áreas empresariales.
Cenicienta, por su experiencia lidiando con gente difícil, sería una excelente publirrelacionista. La reina Grimhilde, del cuento de Blancanieves, una excelente publicista porque logra que los demás hagan lo que ella quiere.
Sin embargo, Arieff y West trabajan con más detalle en la analogía entre las princesas de cuentos de hadas y las emprendedoras . Aunque el libro está dirigido a mujeres jóvenes, sus pautas pueden resultar útiles para todos los que deseen emprender un negocio.
El indiscutible liderazgo de Cenicienta
Con Cenicienta, las autoras explican el camino que cualquier emprendedor debe recorrer para crear una empresa: “Cenicienta es una emprendedora innovadora y determinada, una CEO innata con gran sentido de la mercadotecnia”.
En cada capítulo, las autoras comparan un fragmento de la historia de Cenicienta con las etapas del emprendimiento . Todo esto lo complementan con entrevistas a emprendedoras exitosas que comparten su experiencia. Al final, el objetivo es que las lectoras sepan exactamente qué hacer y cómo hacerlo para obtener lo que quieren.
Arieff y West explican que lo primero que una emprendedora, o aspirante a serlo, debe hacer es descubrir quién es y cuál es su misión.
Cenicienta se quitó la ceniza de la ropa y decidió ir al baile. Las autoras recomiendan un proceso de descubrimiento: cada emprendedor debe hacerse preguntas sobre lo que le importa, la gente que necesita y su idea de la felicidad.
Tampoco está mal cambiar de opinión. Coco Chanel quería ser cantante y bailarina, pero, en lugar de eso, abrió una tienda de sombreros y cambió la historia de la moda.
Una vez que una emprendedora encuentra su misión, debe pensar en su marca. Lo que hace y el eslogan de la marca son una representación de sus creencias.
Uno de los ejemplos que proponen las autoras es el de la marca de zapatos TOMS . Su creencia es que vender debe tener un propósito benéfico para la sociedad, y esto lo muestran en su lema: “One for one”. Por cada par de zapatos que vende, TOMS regala un par a niños en situación de pobreza. La empresa ha donado unos 10 millones de zapatos en más de 60 países.
El siguiente paso es tener un plan. En esta sección del libro, Arieff y West explican cómo escribir un plan de negocios.
Algunas etapas son fijar fechas para cumplir objetivos, contestar preguntas, conseguir retroalimentación y aprender a hablar de un proyecto de manera concreta y concisa. Una vez que el emprendedor tiene una estrategia sólida por escrito con presupuestos y objetivos incluidos, está listo para la magia.
Escoge bien a tu 'hada madrina'
“El hada madrina le enseña a Cenicienta que ya tiene todo lo que necesita para ir al baile”, escriben las autoras. “Con un poco de innovación y creatividad puedes hacer magia con lo que posees, sólo tienes que ver el valor de las cosas”.
Esta sección se concentra en dos puntos clave: conseguir fondos y mentores . Un hada madrina puede estar en cualquier parte, sólo debes saber buscar. Pueden estar en la familia o en sitios web dedicados a financiar ideas, como Kickstarter o Indiegogo. Incluso puedes conseguir ayuda de inversionistas si eres capaz de convencerlos.
Debbie Sterling, una estudiante de ingeniería en Stanford, quería crear un juguete que atrajera a las niñas hacia la ingeniería. Así creó a GoldieBlox, la muñeca inventora y constructora, que empezó como una idea en Kickstarter. Un año después, GoldieBlox logró colocarse en 1,000 tiendas de Estados Unidos.
Las autoras también ponen énfasis en la importancia de construir una red de contactos de los que sea posible aprender.
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“Haz amigos y no sólo contactos de negocios”, recomiendan Arieff y West. “Nunca sabes cuándo un amigo de un área completamente distinta a la tuya tendrá una gran idea para tu negocio”. Las autoras plantean una guía de cómo mejorar la habilidad de comunicarse con los demás para dar y recibir ayuda.
¿Cómo hacer que tu empresa sea feliz para siempre?
En los capítulos siguientes, Arieff y West aconsejan aprender de Cenicienta para llegar al final del cuento. “Durante el baile, no pierdas de vista la corona”, indican. Es decir, incluso si al principio es difícil levantar un negocio, no hay que olvidar los objetivos de la compañía ni su misión.
Cuando el reloj marcó las 12, Cenicienta tuvo que correr para que su carruaje no se convirtiera en calabaza. Con este ejemplo, las autoras explican que todos los emprendedores tienen que aprender a lidiar con obstáculos , incluso los empresarios consolidados. Por eso, siempre hay que tener un plan listo para lidiar con la crisis cuando se presente y no esperar hasta despertar sentado en una calabaza.
Una vez que se ha lanzado una idea al mundo, que se ha conseguido financiamiento, una red de contactos, y que el negocio comienza a levantarse, hay que hacer como Cenicienta, que perdió el miedo a sus hermanastras y se probó la zapatilla de cristal.
“El éxito puede ser más aterrador que el fracaso. Cuando llegue tu momento debes tomarlo, porque podría no volver”, dicen Arieff y West.
En la última sección del libro, Fairy-Tale Success comparte algunos consejos para mantener el éxito, y cómo manejar adecuadamente un presupuesto. Incluso cuando un emprendedor tiene lo que quiere, explican las autoras, debe continuar evaluándose, revisar sus expectativas, y ver la felicidad como un viaje.
“‘Y vivieron felices para siempre’ es un concepto difícil. Es algo que cambia y se ajusta con el curso de tu vida”, escriben.
Miuccia Prada, diseñadora de modas y fundadora de la casa Prada, dice que la única manera de hacer algo a profundidad es trabajando duro. “Cuando empieces a enamorarte de ti y pienses que lo que haces es hermoso y extraordinario, entonces estás en peligro”, advierte.
Fairy-Tale Success es un libro útil y con muchas herramientas sobre qué hacer en cada etapa del emprendimiento. Tal vez su única desventaja es que está dirigido a un público reducido -el de mujeres jóvenes- y los ejemplos de emprendedoras exitosas son de estudiantes o empresarias muy jóvenes, incluso adolescentes.
Sin embargo, todos los conceptos, ejercicios y pasos a seguir pueden ser utilizados por cualquier persona que esté iniciando un negocio. Fuera de ese detalle, el libro demuestra que, con trabajo y dedicación, cualquier historia puede convertirse en una de cuento: sólo hay que saber cómo usar lo que ya se tiene, y buscar en el lugar correcto lo que falta.