‘Concept store’: experiencia a la venta

Esta tendencia, que nació en tiendas de los años 90, gana terreno a las grandes marcas en México; los negocios ofrecen productos únicos y exclusivos que se adaptan a la personalidad de su público.

El reinado de las grandes marcas no está en declive, pero sí empieza a perder bonos en el gusto de los citadinos, o eso demuestra la creciente oleada de concept stores que están surgiendo en algunas urbes.

Pese a que esta clase de tiendas son parte de una tendencia europea que nació en los 90, es 20 años después que empiezan a ganar adeptos en nuestro país.

 A decir de Mónica Biringer, cofundadora de Common People, la concept store más grande de la Ciudad de México, este retraso se debe al miedo, a que "los mexicanos no nos atrevíamos a arriesgarnos, no consumíamos objetos por sí mismos, sino por su marca".

El objetivo de estos espacios es generar una atmósfera en la que cada detalle esté concebido a partir de la personalidad de su público ; ofrecen moda, cultura, arte y hasta gastronomía en un mismo espacio.

"El dueño de la tienda decide qué quiere mostrar a partir de un profundo conocimiento de su clientela, las firmas no importan porque se da por hecho que todo lo que está a la vista es exclusivo, único, de preferencia", dice Biringer, quien junto a su esposo, Max Feldman, creó su tienda en una fastuosa casona de Polanco inspirándose en grandes concept stores del mundo, como la pionera 10 Corso Como de Milán o la célebre Colette, en París.

En la fotogalería (arriba) se expone una selección de estas boutiques idóneas para ilustrar el modo en que esta tendencia está adaptándose a los gustos y estilos de vida de los habitantes de la Ciudad de Mexico.