La reconocida
presentó en el desierto de Atacama, Chile, su más reciente cronógrafo, el Portuguese Sidérale Scafusia, el cual ha conseguido lo impensable: calibrar el movimiento de las estrellas según la zona horaria del propietario.Tras 10 años de trabajo y con la colaboración de un equipo de profesionales que incluyó a ingenieros,
El tiempo sideral es el que utilizan los astrónomos para evaluar el paso de las estrellas.
El reloj que fue presentado por Mario Klein, director de
, se compone de más de 500 piezas y está conformado por dos secciones: anverso y reversoEn su carátula frontal el reloj cuenta con la hora solar, el tiempo sideral y una reserva de marcha de hasta cuatro días.
Al reverso tiene una carta sideral con un cielo nocturno impreso, donde el propietario calcula individualmente la bóveda celeste; posee un calendario perpetuo con un contador del día y un indicador del año bisiesto, además de indicadores para el amanecer y puesta de sol.
De acuerdo con la publicación, esta pieza permite llevar a cabo una actividad que anteriormente era exclusiva de unos pocos y se reducía al trabajo de los astrónomos. "Este reloj es totalmente personalizado, ya que una vez que el comprador establece sus coordenadas geográficas para definir las estrellas y constelaciones del fondo, es momento también de escoger el material de la caja, que puede ser de acero, oro rosa o hasta platino", explica Karoline Huber, directora de Marketing para IWC.
"También puede escoger el material de la correa y el color de la carátula", añade.
El diseño del movimiento del reloj estuvo a cargo de Jean-François Mojon, el hombre detrás del