¿Cuál será el destino de los 10 millones de dólares en joyas de Kim Kardashian?
Pase lo que pase con sus joyas, lo único seguro es que Kim Kardashian muy probablemente no las volverá a ver nunca.
Su anillo con un diamante con valor de 4.5 millones de dólares, robado a mano armada por cinco hombres el lunes, con seguridad será cortado en piedras más pequeñas, mientras que el metal podría ser derretido.
Las autoridades francesas dicen que los ladrones que irrumpieron en el departamento parisiense donde se alojaba Kardashian West se llevaron unos 10 millones de dólares en joyas, incluyendo el mencionado anillo.
Sin embargo, no se sabe con seguridad qué joyas fueron sustraídas, o si están aseguradas. Además del anillo de compromiso que le diera su actual esposo Kanye West en 2013, hay supuestamente otro que el músico le dio el mes pasado, también con un diamante enorme.
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Los ladrones, sin embargo, no tienen el camino fácil desde aquí. Para empezar, deben vender los bienes robados y eso puede ser complicado.
"Si es un anillo de diamantes, con seguridad la piedra terminará convertida en piezas más pequeñas", dijo Lee Henderson, funcionario de inteligencia en la firma SaferGems, que combate los crímenes contra la industria joyera.
"De lo contrario será muy difícil de vender. Nadie querrá tener que ver con él", agregó.
Henderson expresó que las fotos de bienes robados generalmente son distribuidas entre los vendedores legítimos, lo cual hace virtualmente imposible que sean vendidos en su forma original.
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Los ladrones podrían tratar de vender las joyas rápidamente, pero probablemente lo hagan por una fracción de su valor de mercado. También podrían decidirse por esperar un tiempo antes de alterar las piezas robadas.
El romper un diamante en piedras más pequeñas reduce su valor, pero también dificulta el detectar su origen. Algo similar pasa con otras piezas de joyería, ya que por ejemplo las piezas metálicas pueden ser derretidas y vendidas como material en bruto.
Henderson indicó que los ladrones pudieron haber considerado ya estas cuestiones y haber contactado a alguien para que venda las joyas. "O pudieron incluso haber sido robadas bajo pedido", agregó.
Además, el hecho de que las joyas le hayan sido robadas a una celebridad tan conocida como Kardashian dificulta las cosas un poco más.
"Eso podría dificultar el deshacerse de ellas", dijo Henderson.
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Como medida de prevención para el público en general, Henderson recomendó el tomarle fotos a las joyas, a fin de tener material gráfico que permita identificarlas en caso de robo.
Las joyas también pueden ser marcadas con una inscripción hecha con un láser, que es invisible al ojo desnudo, así como con líquidos a prueba de agua llamados marcadores forenses de propiedades, que son detectables bajo la luz ultravioleta.