Hermès, a la conquista de Latinoamérica
La casa de moda parisina Hermès inaugurará una tienda nueva cada año en México y planea una estrategia para vender en América Latina algo más que corbatas.
“Vamos a abrir cuatro tiendas al año en América Latina en los siguientes cuatro años, que se suman a las siete ya existentes”, explica Roland Herlory, director general de Hermès para América Latina y el Caribe.
En México, se contempla, además del DF, las ciudades de Cancún, Guadalajara y Monterrey; mientras que en el resto del continente, las aperturas serán en Brasil, Panamá y Colombia. Latinoamérica sólo representa de 2 a 3% de las ventas mundiales de Hermès. “Esto deja mucho margen de mejora”, dice Herlory.
Una de las mejoras será abrir el abanico de productos consumidos en la región, pues en América Latina y en España, “las corbatas se venden en mucho más del doble que en cualquier otra parte del mundo (de 5 a 10%) y representan alrededor de 20% del total de las ventas”.
El plan de expansión de Hermès en la región no se basará en la mercadotecnia. “No existe ese departamento en la compañía, pues no es parte de nuestra filosofía”, afirma Herlory.
De hecho, dice, “cada nueva apertura es una aventura y buscamos encajar en cada lugar, tratando de ser fieles a nosotros mismos y nuestra vocación artesanal”. Hermès emplea a unas 6,000 personas en todo el mundo, la mitad de ellas artesanos. Quizás por este cuidado del detalle y evitar planes agresivos de expansión es que Hermès fue una de las pocas compañías de lujo que aumentó el valor de sus acciones en los últimos 10 meses.