La inversión en Brasil beneficia a Slim
Desde el Banco Mundial hasta el presidente Luiz Inácio Lula da Silva auguran que el gigante sudamericano se convertirá en la quinta economía mundial en la próxima década. Las razones van desde las inversiones para el Mundial de Futbol 2014 que inyectarán a Brasil 81,360 millones de dólares (mdd) entre 2010 y 2014, según un estudio de la consultora Ernst & Young y la Fundação Getulio Vargas. A esto se agregarán 51,100 mdd entre 2009 y 2017 por las inversiones previstas para los Juegos Olímpicos 2016 de Río de Janeiro, además de aquellas involucradas en la explotación de los yacimientos de petróleo hallados en 2005.
Pero en la tierra del tudo bem también están surgiendo voces escépticas . "El promedio del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) por las olimpiadas será de 0.7% anual en los tres años anteriores y en el año del evento" dice Aurélio Bicalho, economista del Banco Itaú.
El capital privado no está interesado en los estadios porque pueden convertirse en ‘elefantes blancos', mientras que operadores privados ya reservaron una decena de barcos de 3,000 a 4,000 pasajeros para amarrarlos en las costas de Río de Janeiro y usarlos como hotel.
Sin embargo hay sectores, como el de telecomunicaciones, que sí podrán beneficiarse. Según un estudio del Ministerio de Deportes de Brasil, habrá inversiones de 5,900 mdd. Un protagonista será Grupo Slim, que en Brasil controla la segunda mayor operadora de telefonía celular y la telefónica Embratel, además de contar con una participación en la mayor empresa de TV por cable.
"América Movil se beneficiará porque está presente en las 12 ciudades sede del mundial, pero estos eventos son un arma de doble filo: deberá invertir mucho, por ejemplo, en roaming para recibir el tráfico que provendrá de Argentina, Chile, etcétera", dice Eduardo Tude, presidente de la consultora Teleco.