¿Es usted de los que aún se conmueven con el rock espacial –progresivo, le decían los generalistas– compuesto por el legendario Pink Floyd? Le importará, entonces, saber que existen dos grupos en Gran Bretaña emparentados estilísticamente con los autores del clásico The dark side of the moon. Uno de ellos, Spiritualized, es un sexteto con varios años de bregar en la escena musical. Su más reciente entrega, Live, es un álbum doble (Deconstruction/Arista), grabado en concierto en el londinense Royal Albert Hall con cuerdas, alientos y coro gospel.
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Los otros nietos de sangre pinkfloydiana se hacen llamar The Beta Band y acaban de reunir las 12 canciones que han lanzado al mercado en un solo CD, The Three E.P.’s (Astralwerks). ¿A qué suenan? Imagine usted que la gran banda progresiva se hubiera quedado dormida a mediados de los 70 y hubiese despertado hoy, a fines de los 90, con el mismo gusto por el folk y la electrónica, pero en plena efervescencia del hip, del trip y de otros hops. Hay quienes, ansiosos, ya esperan su The Wall.