Entretenimiento. Gobierno de película
Inspirado en el éxito de películas como Sexo, pudor y lágrimas , que tuvo una ganancia de $118 millones de pesos, el gobierno perredista de la Ciudad de México decidió entrar al negocio de la exhibición de cine.
- En febrero adquirió en $88 millones de pesos cuatro salas cinematográficas del paquete de teatros que desdeñó el empresario Ricardo Salinas Pliego, para crear un circuito de exhibición de películas mexicanas y extranjeras ajenas a la corriente comercial estadounidense.
- El precio de los cuatro inmuebles –Futurama, Pecime, Bella Época y París– fue $2 millones menos de lo aprobado por la Asamblea Legislativa para el proyecto.
- Los cines serán divididos en 26 salas para después ser concesionados. Representantes del gobierno capitalino y la industria cinematográfica formarán un comité que se encargará de vigilar que el proyecto cumpla tres objetivos: apoyar al cine nacional, mantener precios de taquilla accesibles y evitar la creación de un monopolio.
- “El cine mexicano puede ser un negocio rentable, obviamente no se compara con los circuitos comerciales con películas de Hollywood”, explica Rossana Barro, directora de la división fílmica de Quality Films. “Nuestras películas son ganadoras de festivales y eso es una garantía en taquilla”, afirma Barro.
- Las autoridades capitalinas no han ofrecido ninguna meta o proyección de negocios, pero el proyecto cuenta con el apoyo de la comunidad cinematográfica. Moisés Muñoz Rivera, director general del Fondo de Desarrollo Económico del DF explica a su vez que existen acuerdos de intercambio cinematográfico con España, Brasil, Italia y Argentina.