Salvador Dalí siempre se sintió atraído por Luis XIV, el rey Sol. Decía sentirse fascinado por su autoridad y su extravagancia, y por eso lo pintó. La obra sirvió de inspiración para crear Le Roy Soleil, un perfume para mujer que ahora tiene una versión masculina francamente exquisita.
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El aroma es exótico y fresco, con notas de toronja rosa, azahares, ¡brisa marina! (imagínese qué mezcla), y cedro. El frasco –esculpido en alto relieve con la obra del genial pintor– es el envase perfecto para una fragancia singular.