Hasta las guitarras son de China
A pesar de ser un pequeño pueblo de Michoacán, Paracho no ha quedado a salvo de los coletazos del dragón. La entrada de guitarras chinas pone en riesgo la principal fuente de ingresos de este municipio de 30,000 habitantes, en el que cerca de 60% vive de fabricar guitarras.
- En este pueblo se fabrican al año alrededor de 99% de las guitarras que se venden en el país (unas 400,000), pero a raíz de la competencia china la producción bajó 10%, sacando de golpe del mercado a 300 artesanos locales.
- Teodoro Barajas, coordinador de enlace de la Feria Nacional de la Guitarra, que año con año se realiza en Michoacán, afirma que la guitarra proveniente del país asiático le ha robado cerca de 30% del mercado a Paracho.
- Las cadenas de autoservicio, como Soriana, son las que importan principalmente el instrumento musical. En una de estas tiendas se puede comprar una guitarra china en $300 pesos, es decir 50% más barata que una de Paracho. “Nuestras guitarras duran años, mientras que las chinas sólo seis meses”, asegura Barajas.
- En 1996 entraron al país 2,500 guitarras chinas, para 2004 llegaron más de 12,000. Las pérdidas económicas para los fabricantes michoacanos ascienden a unos $8 millones de pesos. Antes de que llegara la competencia, las ventas anuales rondaban los $112 millones de pesos y en la actualidad los ingresos disminuyeron a $104 millones de pesos.
- Hace dos años el gobierno local pidió a la Secretaría de Economía que decrete salvaguardas para contrarrestar, así como regular, la competencia desleal de productos asiáticos y aplicar mayor rigidez en las cuotas arancelarias, la respuesta sigue sin llegar. La invasión de guitarras chinas no sólo les quita mercado, sino que es “un golpe directo al orgullo de Paracho”, agrega Eloy Vargas, secretario de Promoción Económica del Estado de Michoacán.