Las campañas de mercadotecnia sirven para acercar un producto a su público. Algunas tienen tanto éxito que convierten una mercancía desconocida en un habitante indispensable de las casas… y de las mentes de los consumidores. Entran a la memoria colectiva y ahí se quedan tiempo después de haber aparecido en los medios masivo de difusión. Pueden, incluso, sobrevivir al producto anunciado.
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Presentamos una lista de las campañas más recordadas en México, resultado de un sondeo (hecho sin métodos estadísticos) en una muestra que podría estar sesgada hacia una población menor a los 35 años. Aun así aparecen ejemplos de un pasado no tan reciente.
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En las menciones se incluyeron tanto campañas completas como eslóganes aislados. Se pidió a los participantes que primero mencionaran las 10 campañas que más recordaran y después que pusieran una calificación del 1 al 5 (de menos a más) a una lista de más de 100. El triunfador indiscutible fue el eslogan de Sabritas (“a que no puedes comer sólo una”), ideado en tiempos ya remotos. Le siguen la canción de los tomatitos de El Fuerte y la frase de El Palacio de Hierro.
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En el recuento quedaron fuera muchas de las campañas más recordadas, por tratarse de adaptaciones a esfuerzos globales (como las de Coca-Cola y Marlboro).
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