La fiebre por cruzar el umbral hacia el próximo siglo es realmente contagiosa, y la industria automotriz se aprovecha de ello para atraer clientela.
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Ahora, General Motors se cuelga de la fama que dejara el Impala en los 60 y 70, para crear el primer modelo “2000” de la empresa. Bajo la línea Chevrolet, el Impala 2000 viene a llenar el hueco que dejaron el Century y el Cutlass en el segmento de large-cars (carros largos) de la compañía. Este cochesote, con amplio espacio interior, está dirigido a los cincuentones con familia hasta de seis integrantes.
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Algunas monerías con las que cuenta el renacido Impala son: retrovisores externos muy amplios y con calefactor, control de temperatura dual para que el conductor y su acompañante ambienten sus respectivas zonas a placer, controles del estéreo en el volante, sensor que monitorea el inflado de las llantas y suspensión independiente en las cuatro ruedas.
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Si es que alguien se quedó con antojo de manejar un Impala o simplemente desea volver a hacerlo, esta nueva oportunidad tiene un precio base de $256,000 pesos. La nostalgia cuesta…